Nueva Biblia Latinoamericana
Y mientras El iba avanzando, tendían sus mantos por el camino. (Lucas 19:36)
Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del Monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios a gran voz por todas las maravillas que habían visto, (Lucas 19:37)
diciendo: "¡BENDITO EL REY QUE VIENE EN EL NOMBRE DEL SEÑOR! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!" (Lucas 19:38)
Entonces algunos de los Fariseos de entre la multitud Le dijeron: "Maestro, reprende a Tus discípulos."
Pero El respondió: "Les digo que si éstos se callan, las piedras clamarán." (Lucas 19:40)
Cuando Jesús se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre ella, (Lucas 19:41)
diciendo: "¡Si tú también hubieras sabido en este día lo que conduce a la paz! Pero ahora está oculto a tus ojos. (Lucas 19:42)

Otras publicaciones relacionadas con "Lucas 19:39":

Charles Spurgeon
¡Venga Tu reino!
¡Venga Tu reino! - La tierra será llena de la gloria del Señor y Jesús será coronado como Rey. Reflexiones sobre la venida del reino de Dios y la importancia de mantenernos fortalecidos en la fe.


Dr. Roberto Miranda
El Señor está cerca
En este artículo se habla sobre la importancia de regocijarse siempre en el Señor y de tener una vida centrada en la cercanía con Cristo, así como de ser gentiles y amables con los demás. También se enfatiza la importancia de vivir la vida a la luz de la Segunda Venida de Cristo y de estar preparados para su llegada, y se explica la visión de Daniel en el libro de la Biblia.


Lucas 19:39 - Referencia Cruzada

Pero los principales sacerdotes resolvieron matar también a Lázaro; (Juan 12:10)
¿Qué haremos con estos hombres?" decían. "Porque el hecho de que un milagro (una señal) notable ha sido realizado por medio de ellos es evidente a todos los que viven en Jerusalén, y no podemos negarlo. (Hechos 4:16)
Pero, ¡ay de ustedes, escribas y Fariseos, hipócritas que cierran el reino de los cielos delante de los hombres! Porque ni entran ustedes, ni dejan entrar a los que están entrando. (Mateo 23:13)
Pero cuando los principales sacerdotes y los escribas vieron las maravillas que había hecho, y a los muchachos que gritaban en el templo y decían: "¡Hosanna al Hijo de David!" se indignaron. (Mateo 21:15)
Entonces los Fariseos se decían unos a otros: "¿Ven que ustedes no consiguen nada? Miren, todo el mundo se ha ido tras El." (Juan 12:19)
Oh SEÑOR, levantada está Tu mano, mas ellos no la ven. Que vean Tu celo por el pueblo y se avergüencen. Ciertamente el fuego devorará a Tus enemigos. (Isaías 26:11)
Mientras Pedro y Juan hablaban al pueblo, se les echaron encima los sacerdotes, el capitán de la guardia del templo, y los Saduceos, (Hechos 4:1)
¿O piensan que la Escritura dice en vano: "Dios celosamente anhela el Espíritu que ha hecho morar en nosotros?" (Santiago 4:5)
Entonces los principales sacerdotes y los Fariseos convocaron un concilio, y decían: "¿Qué hacemos? Porque este hombre hace muchas señales (muchos milagros). (Juan 11:47)