Mientras ellos iban por el camino, uno Le dijo: "Te seguiré adondequiera que vayas."
(Lucas 9:57)
Las zorras tienen madrigueras (cuevas) y las aves del cielo nidos," le dijo Jesús, "pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza."
(Lucas 9:58)
A otro le dijo: "Ven tras Mí." Pero él contestó: "Señor, permíteme que vaya primero a enterrar a mi padre."
(Lucas 9:59)
Deja que los muertos entierren a sus muertos," le respondió Jesús; "pero tú, ve y anuncia por todas partes el reino de Dios."
También otro dijo: "Te seguiré, Señor; pero primero permíteme despedirme de los de mi casa."
(Lucas 9:61)
Pero Jesús le dijo: "Nadie, que después de poner la mano en el arado mira atrás, es apto para el reino de Dios."
(Lucas 9:62)
Después de esto, el Señor designó a otros setenta, y los envió de dos en dos delante de El, a toda ciudad y lugar adonde El había de ir.
(Lucas 10:1)
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Lucas 9:60 - Referencia Cruzada
De manera que nosotros de ahora en adelante ya no conocemos a nadie según la carne. Aunque hemos conocido a Cristo según la carne, sin embargo, ahora ya no Lo conocemos así.
(2 Corintios 5:16)
Pero tú, sé sobrio en todas las cosas, sufre penalidades, haz el trabajo de un evangelista, cumple tu ministerio.
(2 Timoteo 4:5)
Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: 'El que tiene los siete Espíritus de Dios y las siete estrellas, dice esto: "Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, pero estás muerto.
(Apocalipsis 3:1)
Y El les dio vida a ustedes, que estaban muertos en (a causa de) sus delitos y pecados,
(Efesios 2:1)
Pero la que se entrega a los placeres desenfrenados, aun viviendo, está muerta.
(1 Timoteo 5:6)
Porque si predico el evangelio (anuncio las buenas nuevas), no tengo nada de qué gloriarme, pues estoy bajo el deber de hacerlo. Pues ¡ay de mí si no predico el evangelio!
(1 Corintios 9:16)
Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque éste, tu hermano, estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado.'"
(Lucas 15:32)
Sufre penalidades conmigo, como buen soldado de Cristo Jesús.
(2 Timoteo 2:3)
aun cuando estábamos muertos en (a causa de) nuestros delitos, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia ustedes han sido salvados),
(Efesios 2:5)
Cuando acabaron de desayunar, Jesús dijo a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿Me amas más que éstos?" "Sí, Señor, Tú sabes que Te quiero," Le contestó* Pedro. Jesús le dijo: "Apacienta Mis corderos."
(Juan 21:15)
Predica la palabra. Insiste a tiempo y fuera de tiempo. Amonesta, reprende, exhorta con mucha (toda) paciencia e instrucción.
(2 Timoteo 4:2)