y se acuesta de noche y se levanta de día, y la semilla brota y crece; cómo, él no lo sabe.
(Marcus 4:27)La tierra produce fruto por sí misma; primero la hoja, luego la espiga, y después el grano maduro en la espiga.
(Marcus 4:28)Y cuando el fruto lo permite, él enseguida mete la hoz, porque ha llegado el tiempo de la siega."
(Marcus 4:29)También Jesús decía:"¿A qué compararemos el reino de Dios, o con qué parábola lo describiremos?
Es como un grano de mostaza, el cual, cuando se siembra en la tierra, aunque es más pequeño que todas las semillas que hay en la tierra,
(Marcus 4:31)sin embargo, después de sembrado, crece y llega a ser más grande que todas las hortalizas y echa grandes ramas, tanto que LAS AVES DEL CIELO pueden ANIDAR BAJO SU SOMBRA."
(Marcus 4:32)Con muchas parábolas como éstas Jesús les hablaba la palabra, según podían oírla;
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Marcus 4:30 - Referencia Cruzada
¿Cómo he de amonestarte? ¿A qué te compararé, Hija de Jerusalén? ¿A qué te igualaré al consolarte, Virgen hija de Sion? Porque grande como el mar es tu ruina; ¿Quién te podrá sanar?
(Lamentaciones 2:13)Pero, ¿con qué compararé a esta generación? Es semejante a los muchachos que se sientan en las plazas, que dan voces a los otros,
(Mateo 11:16)Entonces Jesús decía: "¿A qué es semejante el reino de Dios y con qué lo compararé?
(Lucas 13:18)Jesús les contó otra parábola: "El reino de los cielos puede compararse a un hombre que sembró buena semilla en su campo.
(Mateo 13:24)Otra parábola les contó Jesús: "El reino de los cielos es semejante a un grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo,
(Mateo 13:31)