Nueva Biblia Latinoamericana
Jesús les dijo: "No todos pueden aceptar este precepto, sino sólo aquéllos a quienes les ha sido dado. (Mateo 19:11)
Porque hay eunucos que nacieron así desde el seno de su madre, y hay eunucos que fueron hechos eunucos por los hombres, y también hay eunucos que a sí mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los cielos. El que pueda aceptar esto, que lo acepte." (Mateo 19:12)
Entonces trajeron algunos niños a Jesús para que pusiera las manos sobre ellos y orara; y los discípulos los reprendieron. (Mateo 19:13)
Pero Jesús dijo: "Dejen a los niños, y no les impidan que vengan a Mí, porque de los que son como éstos es el reino de los cielos."
Y después de poner El las manos sobre ellos, se fue de allí. (Mateo 19:15)
Y un hombre se acercó a Jesús y Le dijo: "Maestro, ¿qué cosa buena haré para obtener la vida eterna?" (Mateo 19:16)
Jesús le respondió: "¿Por qué Me preguntas acerca de lo que es bueno? Sólo Uno es bueno; pero si deseas entrar en la vida, guarda los mandamientos." (Mateo 19:17)

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Mateo 19:14 - Referencia Cruzada

Pero Ana no subió, pues dijo a su marido: "No subiré hasta que el niño sea destetado. Entonces lo llevaré para que se presente delante del SEÑOR y se quede allí para siempre." (1 Samuel 1:22)
Hermanos, no sean niños en la manera de pensar. Más bien, sean niños en la malicia, pero en la manera de pensar sean maduros. (1 Corintios 14:20)
Abraham tenía noventa y nueve años cuando fue circuncidado, (Génesis 17:24)
Samuel, siendo niño, ministraba delante del SEÑOR usando un efod de lino. (1 Samuel 2:18)
Cuando Jesús vio esto, se indignó y les dijo: "Dejen que los niños vengan a Mí; no se lo impidan, porque de los que son como éstos es el reino de Dios. (Marcus 10:14)
A los ocho días Abraham circuncidó a su hijo Isaac, como Dios le había mandado. (Génesis 21:4)
En aquel tiempo, Jesús dijo: "Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque ocultaste estas cosas a sabios e inteligentes, y las revelaste a los niños. (Mateo 11:25)
Estableceré Mi pacto contigo y con tu descendencia después de ti, por todas sus generaciones, por pacto eterno, de ser Dios tuyo y de toda tu descendencia después de ti. (Génesis 17:7)
Pero Jesús, llamándolos a su lado, dijo: "Dejen que los niños vengan a Mí, y no se lo impidan, porque de los que son como éstos es el reino de Dios. (Lucas 18:16)
Después de haberlo destetado, llevó consigo al niño, y lo trajo a la casa del SEÑOR en Silo, aunque el niño era pequeño. También llevó un novillo de tres años, un efa (22 litros) de harina y un odre de vino. (1 Samuel 1:24)
y dijo: "En verdad les digo que si no se convierten y se hacen como niños, no entrarán en el reino de los cielos. (Mateo 18:3)
Pero él me dijo: 'Vas a concebir y a dar a luz un hijo; desde ahora no beberás vino ni licor, ni comerás cosa inmunda, porque el niño será Nazareo para Dios desde el seno materno hasta el día de su muerte.'" (Jueces 13:7)
Entonces hizo voto y dijo: "Oh SEÑOR de los ejércitos, si Te dignas mirar la aflicción de Tu sierva, Te acuerdas de mí y no Te olvidas de Tu sierva, sino que das un hijo a Tu sierva, yo lo dedicaré al SEÑOR por todos los días de su vida y nunca pasará navaja sobre su cabeza." (1 Samuel 1:11)
Por tanto, desechando toda malicia, y todo engaño, e hipocresías, y envidias y toda difamación, (1 Pedro 2:1)