Nueva Biblia Latinoamericana
El que tiene oídos, que oiga. (Mateo 11:15)
Pero, ¿con qué compararé a esta generación? Es semejante a los muchachos que se sientan en las plazas, que dan voces a los otros, (Mateo 11:16)
y dicen: 'Les tocamos la flauta, y no bailaron; entonamos endechas (cantos fúnebres), y no se lamentaron.' (Mateo 11:17)
Porque vino Juan que no comía ni bebía, y dicen: 'Tiene un demonio.'
Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: 'Miren, un hombre glotón y bebedor de vino, amigo de recaudadores de impuestos y de pecadores.' Pero la sabiduría se justifica por sus hechos." (Mateo 11:19)
Entonces Jesús comenzó a reprender a las ciudades en las que había hecho la mayoría de Sus milagros, porque no se habían arrepentido: (Mateo 11:20)
¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros que se hicieron en ustedes se hubieran hecho en Tiro y en Sidón, hace tiempo que se hubieran arrepentido en cilicio y ceniza. (Mateo 11:21)

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Mateo 11:18 - Referencia Cruzada

Tampoco entres en casa de banquete para sentarte con ellos a comer y beber." (Jeremías 16:8)
Le basta al discípulo llegar a ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al dueño de la casa lo han llamado Beelzebú, ¡cuánto más a los de su casa! (Mateo 10:25)
El SEÑOR te ha puesto por sacerdote en lugar del sacerdote Joiada, para estar encargado en la casa del SEÑOR de todo loco que profetice, a fin de que lo pongas en el cepo y la argolla. (Jeremías 29:26)
Mientras Pablo decía esto en su defensa, Festo dijo a gran voz: "¡Pablo, estás loco! ¡Tu mucho saber te está haciendo perder la cabeza!" (Hechos 26:24)
Y muchos de ellos decían: "Tiene un demonio y está loco. ¿Por qué Le hacen caso?" (Juan 10:20)
Entonces Jehú salió a los siervos de su señor, y uno le dijo: "¿Va todo bien? ¿Por qué vino a ti este loco?" Y él les dijo: "Ustedes conocen bien al hombre y sus palabras." (2 Reyes 9:11)
No me senté en la asamblea de los que se divierten, ni me regocijé. A causa de Tu mano, solitario me senté, Porque de indignación me llenaste. (Jeremías 15:17)
Los Judíos Le contestaron: "¿No decimos con razón que Tú eres Samaritano y que tienes un demonio?" (Juan 8:48)
sino que golpeo mi cuerpo y lo hago mi esclavo, no sea que habiendo predicado a otros, yo mismo sea descalificado. (1 Corintios 9:27)
La multitud contestó: "¡Tienes un demonio! ¿Quién Te quiere matar?" (Juan 7:20)
porque él será grande delante del Señor. No beberá vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo aun desde el vientre de su madre, (Lucas 1:15)
Han llegado los días del castigo, Han llegado los días de la retribución; ¡Que lo sepa Israel! Un insensato es el profeta, Un loco el hombre inspirado, A causa de la magnitud de tu culpa, Y por tu mucha hostilidad. (Oseas 9:7)
Y él, Juan, tenía un vestido de pelo de camello y un cinto de cuero a la cintura; y su comida era de langostas (saltamontes) y miel silvestre. (Mateo 3:4)