Pero si tu ojo está malo, todo tu cuerpo estará lleno de oscuridad. Así que, si la luz que hay en ti es oscuridad, ¡cuán grande será la oscuridad!
(Mateo 6:23)
Nadie puede servir a dos señores; porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o apreciará a uno y despreciará al otro. Ustedes no pueden servir a Dios y a las riquezas.
(Mateo 6:24)
Por eso les digo, no se preocupen por su vida, qué comerán o qué beberán; ni por su cuerpo, qué vestirán. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que la ropa?
(Mateo 6:25)
Miren las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No son ustedes de mucho más valor que ellas?
¿Quién de ustedes, por ansioso que esté, puede añadir una hora al curso de su vida?
(Mateo 6:27)
Y por la ropa, ¿por qué se preocupan? Observen cómo crecen los lirios del campo; no trabajan, ni hilan.
(Mateo 6:28)
Pero les digo que ni Salomón en toda su gloria se vistió como uno de ellos.
(Mateo 6:29)
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Mateo 6:26 - Referencia Cruzada
A Ti miran los ojos de todos, Y a su tiempo Tú les das su alimento.
(Salmos 145:15)
¿No se venden dos pajarillos por una monedita? Y sin embargo, ni uno de ellos caerá a tierra sin permitirlo el Padre.
(Mateo 10:29)
Todos ellos esperan en Ti Para que les des su comida a su tiempo.
(Salmos 104:27)
Que nos enseña más que a las bestias de la tierra, Y nos hace más sabios que las aves de los cielos?'
(Job 35:11)
¿Quién prepara para el cuervo su alimento Cuando sus crías claman a Dios Y vagan sin comida?
(Job 38:41)
También les dijo Dios: "Miren, Yo les he dado a ustedes toda planta que da semilla que hay en la superficie de toda la tierra, y todo árbol que tiene fruto que da semilla; esto les servirá de alimento.
(Génesis 1:29)
¿No se venden cinco pajarillos por dos moneditas? Y sin embargo, ni uno de ellos está olvidado ante Dios.
(Lucas 12:6)
Porque los Gentiles (los paganos) buscan ansiosamente todas estas cosas; que el Padre celestial sabe que ustedes necesitan todas estas cosas.
(Mateo 6:32)
Dan de beber a todas las bestias del campo, Los asnos monteses mitigan su sed.
(Salmos 104:11)
El da su alimento al ganado Y a la cría de los cuervos cuando chillan.
(Salmos 147:9)
¿O qué hombre hay entre ustedes que si su hijo le pide pan, le dará una piedra,
(Mateo 7:9)
Consideren los cuervos, que ni siembran ni siegan; no tienen bodega ni granero, y sin embargo, Dios los alimenta. ¡Cuánto más valen ustedes que las aves!
(Lucas 12:24)