Pero cuando el impío se aparta de su maldad y practica el derecho y la justicia, vivirá por ello.
(Ezequiel 33:19)Sin embargo ustedes dicen: 'No es recto el camino del Señor.' Yo los juzgaré a cada uno de ustedes según sus caminos, oh casa de Israel."
(Ezequiel 33:20)En el año duodécimo de nuestro destierro, a los cinco días del mes décimo, vino a mí un fugitivo de Jerusalén, diciendo: "La ciudad ha sido tomada."
(Ezequiel 33:21)Y la mano del SEÑOR había venido sobre mí la tarde antes de llegar el fugitivo. Y El abrió mi boca cuando aquél llegó a mí por la mañana; mi boca se abrió y dejé de estar mudo.
Hijo de hombre, los que viven en estos lugares desolados de la tierra de Israel, dicen: 'Uno solo era Abraham, y poseyó la tierra; así que a nosotros que somos muchos se nos ha dado la tierra en posesión.'
(Ezequiel 33:24)Por tanto, diles: 'Así dice el Señor DIOS: "Ustedes comen carne con sangre, alzan los ojos a sus ídolos mientras derraman sangre. ¿Poseerán entonces la tierra?
(Ezequiel 33:25)Otras publicaciones relacionadas con "Ezequiel 33:22":
Ezequiel 33:22 - Referencia Cruzada
La mano del SEÑOR vino allí sobre mí, y El me dijo: "Levántate, ve a la llanura, y allí te hablaré."
(Ezequiel 3:22)La mano del SEÑOR vino sobre mí, y me sacó en el Espíritu del SEÑOR, y me puso en medio del valle que estaba lleno de huesos.
(Ezequiel 37:1)En el año veinticinco de nuestro destierro, al principio del año, a los diez días del mes, catorce años después de haber sido tomada la ciudad, en aquel mismo día vino sobre mí la mano del SEÑOR, y me llevó allá.
(Ezequiel 40:1)Haré que tu lengua se te pegue al paladar y enmudecerás, y no serás para ellos el hombre que reprenda, porque son una casa rebelde.
(Ezequiel 3:26)Al instante le fue abierta su boca y suelta su lengua, y comenzó a hablar dando alabanza a Dios.
(Lucas 1:64)en ese día el que escape vendrá a ti con noticias para tus oídos?
(Ezequiel 24:26)la palabra del SEÑOR fue dirigida al sacerdote Ezequiel, hijo de Buzi, en la tierra de los Caldeos junto al río Quebar, y allí vino sobre él la mano del SEÑOR.)
(Ezequiel 1:3)