Nueva Biblia Latinoamericana
Vivo Yo," declara el Señor DIOS, "que no volverán a usar más este proverbio en Israel. (Ezequiel 18:3)
Todas las almas son Mías; tanto el alma del padre como el alma del hijo Mías son. El alma que peque, ésa morirá. (Ezequiel 18:4)
Pero el hombre que es justo, y practica el derecho y la justicia, (Ezequiel 18:5)
no come en los santuarios de los montes ni levanta sus ojos a los ídolos de la casa de Israel. No deshonra a la mujer de su prójimo, ni se acerca a una mujer durante su menstruación.
Ese hombre no oprime a nadie, sino que devuelve al deudor su prenda; no comete robo, sino que da su pan al hambriento y cubre con ropa al desnudo. (Ezequiel 18:7)
No presta dinero a interés ni exige con usura, retrae su mano de la maldad y hace juicio verdadero entre hombre y hombre. (Ezequiel 18:8)
También anda en Mis estatutos y Mis ordenanzas obrando fielmente, ése hombre es justo; ciertamente vivirá," declara el Señor DIOS. (Ezequiel 18:9)

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Ezequiel 18:6 - Referencia Cruzada

Cántico de ascenso gradual. Levantaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi ayuda? (Salmos 121:1)
Y éstas invitaron al pueblo a los sacrificios que hacían a sus dioses, y el pueblo comió y se postró ante sus dioses. (Números 25:2)
Si se encuentra a un hombre acostado con una mujer casada, los dos morirán, el hombre que se acostó con la mujer, y la mujer. Así quitarás el mal de Israel. (Deuteronomio 22:22)
Por tanto, diles: 'Así dice el Señor DIOS: "Ustedes comen carne con sangre, alzan los ojos a sus ídolos mientras derraman sangre. ¿Poseerán entonces la tierra? (Ezequiel 33:25)
Pero Yo les digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya cometió adulterio con ella en su corazón. (Mateo 5:28)
Si un hombre comete adulterio con la mujer de otro hombre, (que cometa adulterio con la mujer de su prójimo), el adúltero y la adúltera ciertamente han de morir. (Levítico 20:10)
Cántico de ascenso gradual. A Ti levanto mis ojos, ¡Oh Tú que reinas en los cielos! (Salmos 123:1)
Eran caballos cebados y fogosos, Cada cual relinchando tras la mujer de su prójimo. (Jeremías 5:8)
Y no te acercarás a una mujer para descubrir su desnudez durante su impureza menstrual. (Levítico 18:19)
Si alguien se acuesta con mujer menstruosa y descubre su desnudez, ha descubierto su flujo, y ella ha puesto al descubierto el flujo de su sangre; por tanto, ambos serán exterminados de entre su pueblo. (Levítico 20:18)
No hagas pacto con los habitantes de aquella tierra, no sea que cuando ellos se prostituyan con sus dioses y les ofrezcan sacrificios, alguien te invite y comas de su sacrificio; (Éxodo 34:15)
Y les dije: 'Cada uno arroje las cosas detestables que les atraen, y no se contaminen con los ídolos de Egipto; Yo soy el SEÑOR su Dios.' (Ezequiel 20:7)
¿O no saben que los injustos no heredarán el reino de Dios? No se dejen engañar: ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, (1 Corintios 6:9)
En ti han estado calumniadores para derramar sangre y en ti han comido en los santuarios de los montes. En ti han cometido perversidades. (Ezequiel 22:9)
Entonces ustedes sabrán que Yo soy el SEÑOR, cuando sus muertos estén en medio de sus ídolos alrededor de sus altares, en toda colina elevada, en todas las cumbres de los montes, bajo todo árbol verde y bajo toda encina frondosa, lugares donde ofrecían aroma agradable a todos sus ídolos. (Ezequiel 6:13)
pues no come en los santuarios de los montes, ni levanta sus ojos a los ídolos de la casa de Israel, ni deshonra a la mujer de su prójimo; (Ezequiel 18:15)
No, sino que digo que lo que los Gentiles sacrifican, lo sacrifican a los demonios y no a Dios; no quiero que ustedes sean partícipes con los demonios. (1 Corintios 10:20)
Y ten cuidado, no sea que levantes los ojos al cielo y veas el sol, la luna, las estrellas y todo el ejército del cielo, y seas impulsado a adorarlos y servirlos, cosas que el SEÑOR tu Dios ha concedido a todos los pueblos debajo de todos los cielos. (Deuteronomio 4:19)
Sea el matrimonio honroso en todos, y el lecho matrimonial sin deshonra, porque a los inmorales y a los adúlteros los juzgará Dios. (Hebreos 13:4)
Ahora bien, las obras de la carne son evidentes, las cuales son: inmoralidad, impureza, sensualidad, (Gálatas 5:19)
(aunque el padre mismo no hizo ninguna de estas cosas); también come en los santuarios de los montes y deshonra a la mujer de su prójimo. (Ezequiel 18:11)
Cuando los traje a la tierra que había jurado darles, miraron a toda colina alta y todo árbol frondoso, y allí ofrecieron sus sacrificios y allí presentaron sus ofrendas provocativas. Allí presentaron también su aroma agradable y allí derramaron sus libaciones. (Ezequiel 20:28)
porque no habían cumplido Mis decretos, habían desechado Mis estatutos y habían profanado Mis días de reposo, y tras los ídolos de sus padres se iban sus ojos. (Ezequiel 20:24)