Nueva Biblia Latinoamericana
Designaré contra ti destructores, Cada uno con sus armas, Y cortarán tus cedros más selectos Y los echarán al fuego. (Jeremías 22:7)
Pasarán muchas naciones junto a esta ciudad, y cada cual dirá a su prójimo: '¿Por qué ha hecho así el SEÑOR a esta gran ciudad?' (Jeremías 22:8)
Entonces responderán: 'Porque abandonaron el pacto del SEÑOR su Dios, y se postraron ante otros dioses y les sirvieron.'" (Jeremías 22:9)
No lloren por el muerto ni hagan duelo por él, Lloren amargamente por el que se va cautivo , Porque jamás volverá Ni verá su tierra natal.
Porque así dice el SEÑOR acerca de Salum (Joacaz), hijo de Josías, rey de Judá, que reinó en lugar de su padre Josías, y que salió de este lugar: "Nunca más volverá aquí; (Jeremías 22:11)
sino que en el lugar adonde lo llevaron cautivo, allí morirá, y no verá más esta tierra. (Jeremías 22:12)
Ay del que edifica su casa sin justicia Y sus aposentos altos sin derecho, Que a su prójimo hace trabajar de balde Y no le da su salario. (Jeremías 22:13)

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Jeremías 22:10 - Referencia Cruzada

Y los arqueros hirieron al rey Josías, y el rey dijo a sus siervos: "Llévenme, porque estoy gravemente herido." (2 Crónicas 35:23)
Por tanto, te reuniré con tus padres y serás recogido en tu sepultura en paz, y tus ojos no verán todo el mal que Yo voy a traer sobre este lugar."'" Y llevaron la respuesta al rey. (2 Reyes 22:20)
Pero Jesús, volviéndose a ellas, dijo: "Hijas de Jerusalén, no lloren por Mí; lloren más bien por ustedes mismas y por sus hijos. (Lucas 23:28)
Sus siervos llevaron su cuerpo en un carro desde Meguido, lo trajeron a Jerusalén y lo sepultaron en su sepulcro. Entonces el pueblo de aquella tierra tomó a Joacaz, hijo de Josías, y lo ungieron y lo hicieron rey en lugar de su padre. (2 Reyes 23:30)
Por tanto, así dice el SEÑOR acerca de Joacim, hijo de Josías, rey de Judá: "No llorarán por él: '¡Ay, hermano mío!' o '¡Ay, hermana!' No llorarán por él: '¡Ay, señor!' o '¡Ay, su gloria!' (Jeremías 22:18)
Cuando exaltó a uno de sus cachorros, Este se hizo león, Y aprendió a desgarrar su presa; Devoró hombres. (Ezequiel 19:3)
Más dichosos son los que mueren a espada Que los que mueren de hambre, Que se consumen, extenuados, Por falta de los frutos de los campos. (Lamentaciones 4:9)
Porque así dice el SEÑOR acerca de Salum (Joacaz), hijo de Josías, rey de Judá, que reinó en lugar de su padre Josías, y que salió de este lugar: "Nunca más volverá aquí; (Jeremías 22:11)
Así que felicité a los muertos, los que ya murieron, Más que a los vivos, los que aún viven. (Eclesiastés 4:2)
El justo perece, y no hay quien se preocupe; Los hombres piadosos son arrebatados, sin que nadie comprenda. Porque el justo es arrebatado ante el mal, (Isaías 57:1)