Nueva Biblia Latinoamericana
Voy a traer de lejos una nación contra ustedes, oh casa de Israel," declara el SEÑOR. Es una nación fuerte, Es una nación antigua, Una nación cuya lengua no conoces, Y no podrás entender lo que hable. (Jeremías 5:15)
Su aljaba es como sepulcro abierto, Todos ellos son valientes. (Jeremías 5:16)
Devorará tu cosecha y tu pan, Devorará a tus hijos y a tus hijas, Devorará tus ovejas y tus vacas, Devorará tus viñas y tus higueras; A espada destruirá tus ciudades fortificadas en que confías. (Jeremías 5:17)
Sin embargo, aun en aquellos días," declara el SEÑOR,"no llevaré a cabo una destrucción total de ustedes.
Y cuando te pregunten: '¿Por qué el SEÑOR nuestro Dios nos ha hecho todo esto?' Les dirás: 'Así como ustedes Me dejaron y sirvieron a dioses extraños en su tierra, así servirán a extranjeros en una tierra que no es la de ustedes.' (Jeremías 5:19)
Anuncien esto en la casa de Jacob Y proclámenlo en Judá, diciendo: (Jeremías 5:20)
Oigan ahora esto, pueblo necio e insensible, Que tienen ojos y no ven, Tienen oídos y no oyen. (Jeremías 5:21)

Otras publicaciones relacionadas con "Jeremías 5:18":

Dr. Roberto Miranda
Gran fé en Dios y gran incredulidad de personas que sólo miran el ahora
Este artículo habla sobre la importancia de creer en Dios y tener fe en su poder para cambiar situaciones difíciles. Se menciona la historia de Eliseo en Samaria y cómo representa la fe en Dios para cambiar situaciones imposibles. También se enfatiza la importancia de buscar más poder y autoridad profética de Dios para ser buscada por las autoridades civiles y religiosas de las ciudades y naciones.


Dr. Roberto Miranda
Dios no ha terminado de tratar con los líderes de nuestras naciones
El Dr. Roberto Miranda habla sobre el papel de la iglesia en llamar a los líderes nacionales al arrepentimiento y al acercamiento a Dios a través del temor a Él y del poder profético.


Jeremías 5:18 - Referencia Cruzada

Porque así dice el SEÑOR: "Una desolación será toda la tierra, Pero no causaré una destrucción total. (Jeremías 4:27)
Mientras herían, quedé yo solo y caí sobre mi rostro; clamé y dije: "¡Ah, Señor DIOS! ¿Destruirás a todo el remanente de Israel derramando Tu furor sobre Jerusalén?" (Ezequiel 9:8)
Suban por entre sus hileras de vides y destruyan, Pero no hagan destrucción total; Arranquen sus sarmientos, Pues no son del SEÑOR; (Jeremías 5:10)
Y mientras yo profetizaba, Pelatías, hijo de Benaía, murió. Entonces caí sobre mi rostro, y clamé a gran voz: "¡Ah, Señor DIOS! ¿Vas a acabar por completo con el remanente de Israel?" (Ezequiel 11:13)
Digo entonces: ¿Acaso ha desechado Dios a Su pueblo? ¡De ningún modo! Porque yo también soy Israelita, descendiente de Abraham, de la tribu de Benjamín. (Romanos 11:1)