Nueva Biblia Latinoamericana
Vuelvan, hijos infieles, Yo sanaré su infidelidad. Aquí estamos, venimos a Ti, Porque Tú, el SEÑOR, eres nuestro Dios. (Jeremías 3:22)
Ciertamente un engaño son las colinas Y el tumulto sobre los montes. Ciertamente, en el SEÑOR nuestro Dios Está la salvación de Israel. (Jeremías 3:23)
Pero lo vergonzoso consumió el trabajo de nuestros padres desde nuestra juventud: sus ovejas y sus vacas, sus hijos y sus hijas. (Jeremías 3:24)
Acostémonos en nuestra vergüenza, y que nos cubra nuestra humillación, porque hemos pecado contra el SEÑOR nuestro Dios, nosotros y nuestros padres desde nuestra juventud hasta hoy, y no hemos obedecido la voz del SEÑOR nuestro Dios."
Si has de volver, oh Israel," declara el SEÑOR "vuélvete a Mí. Si quitas de Mi presencia tus abominaciones, Y no vacilas, (Jeremías 4:1)
Y juras: 'Vive el SEÑOR,' En verdad, en juicio y en justicia, Entonces en El serán bendecidas las naciones, Y en El se gloriarán." (Jeremías 4:2)
Porque así dice el SEÑOR a los hombres de Judá y de Jerusalén: "Rompan la tierra no labrada, Y no siembren entre espinos. (Jeremías 4:3)

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Jeremías 3:25 - Referencia Cruzada

Ha caído la corona de nuestra cabeza. ¡Ay de nosotros, pues hemos pecado! (Lamentaciones 5:16)
Se ceñirán de cilicio y los cubrirá el terror; en todos los rostros habrá vergüenza y todas las cabezas estarán rapadas. (Ezequiel 7:18)
Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra despertarán, unos para la vida eterna, y otros para la ignominia, para el desprecio eterno. (Daniel 12:2)
Ahora pues, Dios nuestro, Dios grande, poderoso y temible, que guardas el pacto y la misericordia, No parezca insignificante ante Ti toda la aflicción Que nos ha sobrevenido, a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros sacerdotes, a nuestros profetas, a nuestros padres y a todo Tu pueblo, Desde los días de los reyes de Asiria hasta el día de hoy. (Nehemías 9:32)
Entonces Mi ira se encenderá contra él en aquel día; los abandonaré y esconderé Mi rostro de ellos. Será consumido, y muchos males y tribulaciones vendrán sobre él, por lo que dirá en aquel día: '¿No será porque mi Dios no está en medio de mí que me han alcanzado estos males?' (Deuteronomio 31:17)
Te hablé en tu prosperidad, Pero dijiste: 'No escucharé.' Esta ha sido tu costumbre desde tu juventud, Que nunca has escuchado mi voz. (Jeremías 22:21)
Nuestros padres en Egipto no entendieron Tus maravillas; No se acordaron de Tu infinito amor, Sino que se rebelaron junto al mar, en el Mar Rojo. (Salmos 106:7)
Todos ustedes que encienden fuego, Que se rodean de teas, Anden a la lumbre de su fuego Y entre las teas que han encendido. Esto les vendrá de Mi mano: En tormento yacerán. (Isaías 50:11)
Hija de mi pueblo, cíñete el cilicio Y revuélcate en ceniza. Haz duelo como por hijo único, Lamento de gran amargura, Porque de pronto el destructor Vendrá sobre nosotros. (Jeremías 6:26)
Sí, tú no las oíste, ni nunca las conociste. Ciertamente, no habían sido abiertos de antemano tus oídos, Porque Yo sabía que obrarías con mucha perfidia, Y rebelde te han llamado desde el seno materno. (Isaías 48:8)
No hago esto por ustedes," declara el Señor DIOS, "sépanlo bien. Avergüéncense y abochórnense de su conducta, casa de Israel." (Ezequiel 36:32)
y en cuanto a ustedes, no harán pacto con los habitantes de esta tierra; sus altares derribarán.' Pero no Me han obedecido. ¿Qué es esto que han hecho? (Jueces 2:2)
No he escuchado la voz de mis maestros, Ni he inclinado mi oído a mis instructores. (Proverbios 5:13)
Sean vestidos de oprobio mis acusadores, Y cúbranse con su propia vergüenza como con un manto. (Salmos 109:29)
Como se avergüenza el ladrón cuando es descubierto, Así se ha avergonzado la casa de Israel: Ellos, sus reyes, sus príncipes, Sus sacerdotes y sus profetas. (Jeremías 2:26)
y dije: "Dios mío, estoy avergonzado y confuso para poder levantar mi rostro a Ti, mi Dios, porque nuestras iniquidades se han multiplicado por encima de nuestras cabezas, y nuestra culpa ha crecido hasta los cielos. (Esdras 9:6)
¿Qué fruto tenían entonces en aquellas cosas de las cuales ahora se avergüenzan? Porque el fin de esas cosas es muerte. (Romanos 6:21)
¿No te ha sucedido esto Por haber dejado al SEÑOR tu Dios, Cuando El te guiaba por el camino? (Jeremías 2:17)
Nuestros padres pecaron, ya no existen, Y nosotros cargamos con sus iniquidades. (Lamentaciones 5:7)
Te castigará tu propia maldad, Y tus apostasías te condenarán. Reconoce, pues, y ve que es malo y amargo El dejar al SEÑOR tu Dios, Y no tener temor de Mí," declara el Señor, DIOS de los ejércitos. (Jeremías 2:19)
No hemos escuchado a Tus siervos los profetas que hablaron en Tu nombre a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros padres y a todo el pueblo de la tierra. (Daniel 9:6)
Ve y clama a los oídos de Jerusalén, diciendo: 'Así dice el SEÑOR: "De ti recuerdo el cariño de tu juventud, Tu amor de novia, De cuando Me seguías en el desierto, Por tierra no sembrada. (Jeremías 2:2)