Nueva Biblia Latinoamericana
Nuestro Redentor, el SEÑOR de los ejércitos es Su nombre, El Santo de Israel. (Isaías 47:4)
Siéntate en silencio y entra en las tinieblas, Hija de los Caldeos, Porque nunca más te llamarán Soberana de reinos. (Isaías 47:5)
Estaba enojado contra Mi pueblo, Profané Mi heredad Y en tu mano los entregué. No les mostraste compasión, Sobre el anciano hiciste muy pesado tu yugo, (Isaías 47:6)
Y dijiste: 'Seré soberana para siempre.' No consideraste esto en tu corazón, Ni te acordaste de su resultado.
Ahora pues, oye esto, voluptuosa, Tú que moras confiadamente, Que dices en tu corazón: 'Yo, y nadie más. No me quedaré viuda, Ni sabré de pérdida de hijos.' (Isaías 47:8)
Pero estas dos cosas vendrán de repente sobre ti en un mismo día: Pérdida de hijos y viudez. Vendrán sobre ti en toda su plenitud A pesar de tus muchas hechicerías, A pesar del gran poder de tus encantamientos. (Isaías 47:9)
Te sentiste segura en tu maldad y dijiste: 'Nadie me ve.' Tu sabiduría y tu conocimiento te han engañado, Y dijiste en tu corazón: 'Yo, y nadie más.' (Isaías 47:10)

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Marta Ramirez
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Isaías 47:7 - Referencia Cruzada

Hijo de hombre, eleva una elegía sobre el rey de Tiro y dile: 'Así dice el Señor DIOS: "Tú eras el sello de la perfección, Lleno de sabiduría y perfecto en hermosura. (Ezequiel 28:12)
Ahora viene el fin sobre ti y enviaré Mi ira contra ti; te juzgaré conforme a tus caminos y traeré sobre ti todas tus abominaciones. (Ezequiel 7:3)
Habla y di: 'Así dice el Señor DIOS: "Yo estoy contra ti, Faraón, rey de Egipto, El gran monstruo que yace en medio de sus ríos, Que ha dicho: 'Mío es el Nilo, Yo mismo me lo hice.' (Ezequiel 29:3)
Oh rey, el Dios Altísimo concedió a tu padre Nabucodonosor soberanía (el reino), grandeza, gloria y majestad. (Daniel 5:18)
Los profetas profetizan falsamente, Los sacerdotes gobiernan por su cuenta, Y a Mi pueblo así le gusta. Pero ¿qué harán al final de esto? (Jeremías 5:31)
Por eso derramó sobre él el ardor de Su ira Y la violencia de la batalla. Le prendió fuego por todos lados, Pero él no se dio cuenta; Lo consumió, pero él no hizo caso. (Isaías 42:25)
Hijo de hombre, dile al príncipe de Tiro: 'Así dice el Señor DIOS: "Aun cuando tu corazón se ha enaltecido Y has dicho: 'Soy un dios, Sentado estoy en el trono de los dioses, En el corazón de los mares,' No eres más que un hombre y no dios, Aunque hayas puesto tu corazón como el corazón de un dios. (Ezequiel 28:2)
Acuérdense de esto, y estén confiados (firmes); Pónganlo en su corazón, transgresores. (Isaías 46:8)
Doce meses después, paseándose por la azotea del palacio real de Babilonia, (Daniel 4:29)
Ojalá que fueran sabios, que comprendieran esto, Que comprendieran su futuro. (Deuteronomio 32:29)
Siéntate en silencio y entra en las tinieblas, Hija de los Caldeos, Porque nunca más te llamarán Soberana de reinos. (Isaías 47:5)