Sin que me diera cuenta, mi alma me colocó Sobre los carros de mi noble pueblo."
(Cantares 6:12)
¡Regresa, regresa, oh Sulamita; Regresa, regresa, para que te contemplemos!" "¿Por qué han de contemplar a la Sulamita, Como en la danza de los dos coros?
(Cantares 6:13)
¡Cuán hermosos son tus pies en sandalias, Oh hija de príncipe! Las curvas de tus caderas son como joyas, Obra de manos de artífice.
(Cantares 7:1)
Tu ombligo, como una taza redonda Que nunca le falta vino mezclado; Tu vientre como montón de trigo Cercado de lirios.
Tus dos pechos, como dos crías, Mellizas de una gacela.
(Cantares 7:3)
Tu cuello, como torre de marfil, Tus ojos, como los estanques en Hesbón Junto a la Puerta de Bat Rabim; Tu nariz, como la torre del Líbano Que mira hacia Damasco.
(Cantares 7:4)
Tu cabeza se eleva como el Monte Carmelo, Y la cabellera suelta de tu cabeza es como hilos de púrpura; El rey se ha cautivado de tus trenzas.
(Cantares 7:5)
Otras publicaciones relacionadas con "Cantares 7:2":
Cantares 7:2 - Referencia Cruzada
En lugar de tus padres estarán tus hijos; Los harás príncipes en toda la tierra.
(Salmos 45:16)
Sus manos son barras de oro Engastadas de berilo; Su vientre es marfil tallado Recubierto de zafiros.
(Cantares 5:14)
Por tanto, hermanos míos, también a ustedes se les hizo morir a la Ley por medio del cuerpo de Cristo, para que sean unidos a otro, a Aquél que resucitó de entre los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.
(Romanos 7:4)
Escúchenme, casa de Jacob, Y todo el remanente de la casa de Israel, Los que han sido llevados por Mí desde el vientre, Cargados desde la matriz.
(Isaías 46:3)
Será medicina para tu cuerpo Y alivio para tus huesos.
(Proverbios 3:8)
Antes que Yo te formara en el seno materno, te conocí, Y antes que nacieras, te consagré; Te puse por profeta a las naciones."
(Jeremías 1:5)