Nueva Biblia Latinoamericana
Y el SEÑOR endureció el corazón de Faraón y no los escuchó, tal como el SEÑOR había dicho a Moisés. (Éxodo 9:12)
Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: "Levántate muy de mañana, y ponte delante de Faraón, y dile: 'Así dice el SEÑOR, el Dios de los Hebreos: "Deja ir a Mi pueblo para que Me sirva. (Éxodo 9:13)
Porque esta vez enviaré todas Mis plagas sobre ti, sobre tus siervos y sobre tu pueblo, para que sepas que no hay otro como Yo en toda la tierra. (Éxodo 9:14)
Porque si Yo hubiera extendido Mi mano y te hubiera herido a ti y a tu pueblo con pestilencia, ya habrías sido cortado de la tierra.
Pero en verdad, por esta razón te he permitido permanecer: para mostrarte Mi poder y para proclamar Mi nombre por toda la tierra. (Éxodo 9:16)
Y todavía te enalteces contra Mi pueblo no dejándolos ir. (Éxodo 9:17)
Así que mañana como a esta hora, enviaré granizo muy pesado, tal como no ha habido en Egipto desde el día en que fue fundado hasta ahora. (Éxodo 9:18)

Otras publicaciones relacionadas con "Éxodo 9:15":

Dr. Roberto Miranda
Buena semilla, pero mala tierra
El Capítulo 13 de Números relata la historia de los hebreos que se preparan para entrar en la Tierra Prometida, pero la primera generación de hebreos no pudo entrar debido a su incredulidad y falta de fe. Solo Caleb y Josué, quienes le creyeron a Dios, alcanzaron la bendición. Este artículo nos exhorta a convertirnos en tierra fértil para recibir las semillas de bendición que Dios quiere plantar en nosotros.


Dr. Roberto Miranda
Permanecer firme es una forma poderosa de glorificar a Dios
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda nos habla sobre la importancia de permanecer firmes en nuestra fe y confianza en Dios en momentos de dificultad. Basado en pasajes bíblicos como Éxodo 14 y Salmo 11, el autor nos muestra cómo permanecer firmes es una forma poderosa de glorificar a Dios y preservar nuestra dignidad como soldados en su ejército.


Éxodo 9:15 - Referencia Cruzada

Y esto fue motivo de pecado para la casa de Jeroboam, lo que hizo que fuera borrada y destruida de sobre la superficie de la tierra. (1 Reyes 13:34)
Pero en verdad, por esta razón te he permitido permanecer: para mostrarte Mi poder y para proclamar Mi nombre por toda la tierra. (Éxodo 9:16)
entonces la mano del SEÑOR vendrá con gravísima pestilencia sobre tus ganados que están en el campo: sobre los caballos, sobre los asnos, sobre los camellos, sobre las vacas y sobre las ovejas. (Éxodo 9:3)
Y a la medianoche, el SEÑOR hirió a todo primogénito en la tierra de Egipto, desde el primogénito de Faraón que se sentaba sobre su trono, hasta el primogénito del cautivo que estaba en la cárcel, y todo primogénito del ganado. (Éxodo 12:29)
El SEÑOR hizo esto al día siguiente, y perecieron todos los ganados de Egipto. Pero de los ganados de los Israelitas, ni un solo animal murió. (Éxodo 9:6)
Las aguas volvieron y cubrieron los carros y la caballería, a todo el ejército de Faraón que había entrado tras ellos en el mar. No quedó ni uno de ellos. (Éxodo 14:28)
Pero los impíos serán cortados de la tierra, Y los malvados serán desarraigados de ella. (Proverbios 2:22)
Y Moisés dijo: "Así dice el SEÑOR: 'Como a medianoche Yo pasaré por toda la tierra de Egipto, (Éxodo 11:4)
Pero Yo extenderé Mi mano y heriré a Egipto con todos los prodigios (milagros) que haré en medio de él, y después de esto, los dejará ir. (Éxodo 3:20)