Nueva Biblia Latinoamericana
El SEÑOR hizo esto al día siguiente, y perecieron todos los ganados de Egipto. Pero de los ganados de los Israelitas, ni un solo animal murió. (Éxodo 9:6)
Faraón envió a ver, y ni un solo animal de los ganados de Israel había perecido. Pero el corazón de Faraón se endureció y no dejó ir al pueblo. (Éxodo 9:7)
Entonces el SEÑOR dijo a Moisés y a Aarón: "Tomen puñados de hollín de un horno, y que Moisés lo esparza hacia el cielo en presencia de Faraón. (Éxodo 9:8)
El hollín se convertirá en polvo fino sobre toda la tierra de Egipto, y producirá tumores que resultarán en úlceras en los hombres y en los animales, por toda la tierra de Egipto."
Tomaron, pues, hollín de un horno, y se presentaron delante de Faraón, y Moisés lo arrojó hacia el cielo, y produjo tumores que resultaron en úlceras en los hombres y en los animales. (Éxodo 9:10)
Y los magos (sacerdotes adivinos) no podían estar delante de Moisés a causa de los tumores, pues los tumores estaban tanto en los magos como en todos los Egipcios. (Éxodo 9:11)
Y el SEÑOR endureció el corazón de Faraón y no los escuchó, tal como el SEÑOR había dicho a Moisés. (Éxodo 9:12)

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Éxodo 9:9 - Referencia Cruzada

Te herirá el SEÑOR en las rodillas y en las piernas con llagas malignas de las que no podrás ser sanado, desde la planta de tu pie hasta la coronilla. (Deuteronomio 28:35)
Entonces Satanás salió de la presencia del SEÑOR, e hirió a Job con llagas malignas desde la planta del pie hasta la coronilla. (Job 2:7)
El SEÑOR te herirá con los tumores de Egipto y con úlceras, sarna y comezón, de los que no podrás ser sanado. (Deuteronomio 28:27)
El primer ángel fue y derramó su copa en la tierra, y se produjo una llaga repugnante y maligna en los hombres que tenían la marca de la bestia y que adoraban su imagen. (Apocalipsis 16:2)
Cuando el cuerpo tenga una úlcera en su piel, y se sane, (Levítico 13:18)