Nueva Biblia Latinoamericana
Cántico de ascenso gradual. Cuando el SEÑOR hizo volver a los cautivos de Sion, Eramos como los que sueñan. (Salmos 126:1)
Entonces nuestra boca se llenó de risa, Y nuestra lengua de gritos de alegría; Entonces dijeron entre las naciones: "Grandes cosas ha hecho el SEÑOR con ellos." (Salmos 126:2)
Grandes cosas ha hecho el SEÑOR con nosotros; Estamos alegres. (Salmos 126:3)
Haz volver, SEÑOR, a nuestros cautivos, Como las corrientes en el sur.
Los que siembran con lágrimas, segarán con gritos de júbilo. (Salmos 126:5)
El que con lágrimas anda, llevando la semilla de la siembra, En verdad volverá con gritos de alegría, trayendo sus gavillas. (Salmos 126:6)
Cántico de ascenso gradual; de Salomón. Si el SEÑOR no edifica la casa, En vano trabajan los que la edifican; Si el SEÑOR no guarda la ciudad, En vano vela la guardia. (Salmos 127:1)

Otras publicaciones relacionadas con "Salmos 126:4":

Charles Spurgeon
Los consuelos del Señor
Artículo sobre la promesa de Dios de tener misericordia para con los afligidos y la importancia de adorarle con corazones creyentes.


Charles Spurgeon
No necesitamos ser cautivos
Artículo sobre cómo abandonar el pecado y la cautiverio a través de la confesión y la obediencia a Dios, y volver a la ciudadanía de Sion.


Dr. Roberto Miranda
Zacarias 9:9
Reflexiones sobre el mensaje de esperanza y humildad en Zacarías 9:9 y la importancia de imitar las cualidades de Jesús en nuestra vida diaria.


Salmos 126:4 - Referencia Cruzada

las aguas que venían de arriba se detuvieron y se elevaron en un montón, a una gran distancia en Adam, la ciudad que está al lado de Saretán. Las aguas que descendían hacia el mar de Arabá, el Mar Salado, fueron cortadas completamente. Así el pueblo pasó hasta estar frente a Jericó. (Josué 3:16)
Cántico de ascenso gradual. Cuando el SEÑOR hizo volver a los cautivos de Sion, Eramos como los que sueñan. (Salmos 126:1)
El cojo entonces saltará como un ciervo, Y la lengua del mudo gritará de júbilo, Porque aguas brotarán en el desierto Y arroyos en el Arabá. (Isaías 35:6)
Yo hago algo nuevo, Ahora acontece; ¿No lo perciben? Aun en los desiertos haré camino Y ríos en los lugares desolados. (Isaías 43:19)
Restáuranos, oh Dios de nuestra salvación, Haz cesar Tu indignación contra nosotros. (Salmos 85:4)
Abriré ríos en las alturas desoladas, Y manantiales en medio de los valles. Transformaré el desierto en estanque de aguas, Y la tierra seca en manantiales. (Isaías 41:18)
Y los hijos de Judá y los Israelitas se reunirán, Y nombrarán para sí un solo jefe, Y subirán de la tierra, Porque grande será el día de Jezreel. (Oseas 1:11)