Nueva Biblia Latinoamericana
De todo mal camino he refrenado mis pies, Para guardar Tu palabra. (Salmos 119:101)
No me he desviado de Tus ordenanzas, Porque Tú me has enseñado. (Salmos 119:102)
¡Cuán dulces son a mi paladar Tus palabras!, Sí, más que la miel a mi boca. (Salmos 119:103)
De Tus preceptos recibo entendimiento, Por tanto aborrezco todo camino de mentira.
Nun. Lámpara es a mis pies Tu palabra, Y luz para mi camino. (Salmos 119:105)
He jurado, y lo confirmaré, Que guardaré Tus justas ordenanzas. (Salmos 119:106)
Estoy profundamente afligido; SEÑOR, vivifícame conforme a Tu palabra. (Salmos 119:107)

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Salmos 119:104 - Referencia Cruzada

Tus mandamientos me hacen más sabio que mis enemigos, Porque son míos para siempre. (Salmos 119:98)
Planea la iniquidad en su cama; Se obstina en un camino que no es bueno; No aborrece el mal. (Salmos 36:4)
Los que aman al SEÑOR, aborrezcan el mal; El guarda las almas de Sus santos; Los libra de la mano de los impíos. (Salmos 97:10)
No pondré cosa indigna delante de mis ojos; Aborrezco la obra de los que se desvían; No se aferrará a mí. (Salmos 101:3)
Aborrezcan el mal, amen el bien, Y establezcan la justicia (el derecho) en la puerta (de la ciudad). Tal vez el SEÑOR, Dios de los ejércitos, Sea misericordioso con el remanente de José. (Amós 5:15)
Por tanto, estimo rectos todos Tus preceptos acerca de todas las cosas, Y aborrezco todo camino de mentira. (Salmos 119:128)
El amor sea sin hipocresía; aborreciendo lo malo, aplicándose a lo bueno. (Romanos 12:9)
Entren por la puerta estrecha, porque ancha es la puerta y amplia es la senda que lleva a la perdición (destrucción), y muchos son los que entran por ella. (Mateo 7:13)
Quita de mí el camino de la mentira, Y en Tu bondad concédeme Tu ley. (Salmos 119:29)
Entiendo más que los ancianos, Porque Tus preceptos he guardado. (Salmos 119:100)
Hay camino que al hombre le parece derecho, Pero al final, es camino de muerte. (Proverbios 14:12)
El temor del SEÑOR es aborrecer el mal. El orgullo, la arrogancia, el mal camino Y la boca perversa, yo aborrezco. (Proverbios 8:13)