Y vino que alegra el corazón del hombre, Para que haga brillar con aceite su rostro, Y alimento que fortalece el corazón del hombre.
(Salmos 104:15)
Los árboles del SEÑOR se sacian, Los cedros del Líbano que El plantó,
(Salmos 104:16)
Donde hacen sus nidos las aves, Y la cigüeña, cuya morada está en los cipreses.
(Salmos 104:17)
Los montes altos son para las cabras monteses; Las peñas son refugio para los tejones.
El hizo la luna para señalar las estaciones; El sol conoce el lugar de su ocaso.
(Salmos 104:19)
Tú ordenas la oscuridad y se hace de noche, En ella andan todas las bestias del bosque.
(Salmos 104:20)
Rugen los leoncillos tras su presa, Y buscan de Dios su comida.
(Salmos 104:21)
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Salmos 104:18 - Referencia Cruzada
El damán, porque aunque rumia, no tiene pezuña dividida; será inmundo para ustedes.
(Levítico 11:5)
Pero éstos no comerán de entre los que rumian o de entre los que tienen la pezuña dividida en dos: el camello, el conejo y el damán; pues aunque rumian, no tienen la pezuña dividida; para ustedes serán inmundos.
(Deuteronomio 14:7)
Entonces Saúl tomó de todo Israel 3,000 hombres escogidos, y fue en busca de David y de sus hombres por los peñascos de las cabras monteses.
(1 Samuel 24:2)
Los tejones, pueblo sin poder, Que hacen su casa en la peña;
(Proverbios 30:26)
¿Conoces tú el tiempo en que paren las cabras monteses? ¿Has observado el parto de las ciervas?
(Job 39:1)