Oh Dios de los ejércitos, vuelve ahora, Te rogamos; Mira y ve desde el cielo, y cuida esta vid,
(Salmos 80:14)
La cepa que Tu diestra ha plantado Y el hijo que para Ti has fortalecido.
(Salmos 80:15)
Está quemada con fuego, y cortada; Ante el reproche de Tu rostro perecen.
(Salmos 80:16)
Sea Tu mano sobre el hombre de Tu diestra, Sobre el hijo de hombre que para Ti fortaleciste.
Entonces no nos apartaremos de Ti; Avívanos, e invocaremos Tu nombre.
(Salmos 80:18)
Oh SEÑOR, Dios de los ejércitos, restáuranos; Haz resplandecer Tu rostro sobre nosotros y seremos salvos.
(Salmos 80:19)
Para el director del coro; sobre Gitit. Salmo de Asaf. Canten con gozo a Dios, fortaleza nuestra; Aclamen con júbilo al Dios de Jacob.
(Salmos 81:1)
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(Salmos 80:15)
Salmo de David. Dice el SEÑOR a mi Señor: "Siéntate a Mi diestra, Hasta que ponga a Tus enemigos por estrado de Tus pies."
(Salmos 110:1)
Seguí mirando en las visiones nocturnas, Y en las nubes del cielo Venía uno como un Hijo de Hombre, Que se dirigió al Anciano de Días Y fue presentado ante El.
(Daniel 7:13)
Porque así como el Padre levanta a los muertos y les da vida, asimismo el Hijo también da vida a los que El quiere.
(Juan 5:21)
Y con él estará siempre Mi mano; Mi brazo también lo fortalecerá.
(Salmos 89:21)
Pero El fue herido (traspasado) por nuestras transgresiones, Molido por nuestras iniquidades. El castigo, por nuestra paz, cayó sobre El, Y por Sus heridas (llagas) hemos sido sanados.
(Isaías 53:5)