Nueva Biblia Latinoamericana
Sin embargo ellos pusieron a prueba y provocaron al Dios Altísimo, Y no guardaron Sus testimonios, (Salmos 78:56)
Sino que se volvieron atrás y fueron desleales como sus padres; Se desviaron como arco engañoso. (Salmos 78:57)
Lo provocaron con sus lugares altos, Y despertaron Sus celos con sus imágenes talladas. (Salmos 78:58)
Al oírlo Dios, se indignó, Y aborreció a Israel en gran manera.
Abandonó la morada en Silo, La tienda que había levantado entre los hombres, (Salmos 78:60)
Y entregó al cautiverio Su poderío, Y Su gloria en manos del adversario. (Salmos 78:61)
Entregó también Su pueblo a la espada, Y se indignó contra Su heredad. (Salmos 78:62)

Otras publicaciones relacionadas con "Salmos 78:59":

Juan Carlos Alzamora
Dios les dió un espacio, ahora dénle espacio a Dios
En este artículo, Juan Carlos Alzamora habla sobre la importancia de buscar la presencia y gloria de Dios en nuestras vidas y en las iglesias para experimentar un avivamiento y transformación. Se destaca la historia de avivamiento en Nueva Inglaterra y la importancia de comprometerse a la santidad y buscar a Dios por encima de todo.


Dr. Roberto Miranda
Dios no ha terminado de tratar con los líderes de nuestras naciones
El Dr. Roberto Miranda habla sobre el papel de la iglesia en llamar a los líderes nacionales al arrepentimiento y al acercamiento a Dios a través del temor a Él y del poder profético.


Salmos 78:59 - Referencia Cruzada

Además, no anden en las costumbres de la nación que Yo echaré de delante de ustedes; porque ellos hicieron todas estas cosas, Yo los aborrecí. (Levítico 20:23)
Y el SEÑOR vio esto, y se llenó de ira A causa de la provocación de Sus hijos y de Sus hijas. (Deuteronomio 32:19)
Entonces se encendió la ira del SEÑOR contra Su pueblo, Y El aborreció Su heredad. (Salmos 106:40)
Después el SEÑOR dijo: "El clamor de Sodoma y Gomorra ciertamente es grande, y su pecado es sumamente grave. (Génesis 18:20)
Destruí a los tres pastores en un mes, pues mi alma se impacientó con ellos y su alma también se cansó de mí. (Zacarías 11:8)
El SEÑOR ha mirado desde los cielos sobre los hijos de los hombres Para ver si hay alguien que entienda, Alguien que busque a Dios. (Salmos 14:2)
El SEÑOR está en Su santo templo, el trono del SEÑOR está en los cielos; Sus ojos contemplan, Sus párpados examinan a los hijos de los hombres. (Salmos 11:4)
Sin embargo, a pesar de esto, cuando estén en la tierra de sus enemigos no los desecharé ni los aborreceré tanto como para destruirlos, quebrantando Mi pacto con ellos, porque Yo soy el SEÑOR su Dios. (Levítico 26:44)
El SEÑOR ha rechazado Su altar, Ha despreciado Su santuario; Ha entregado en manos del enemigo Los muros de sus palacios. Gritos se han dado en la casa del SEÑOR Como en día de fiesta solemne. (Lamentaciones 2:7)