Nueva Biblia Latinoamericana
Allí sepultaron a Abraham y a su mujer Sara. Allí sepultaron a Isaac y a su mujer Rebeca, y allí sepulté yo a Lea. (Génesis 49:31)
El campo y la cueva que hay en él, fueron comprados de los hijos de Het." (Génesis 49:32)
Cuando Jacob terminó de encargar estas cosas a sus hijos, recogió sus pies en la cama y expiró, y fue reunido a su pueblo. (Génesis 49:33)
José se echó sobre el rostro de su padre, lloró sobre él y lo besó.
José ordenó a sus siervos médicos que embalsamaran a su padre, y los médicos embalsamaron a Israel. (Génesis 50:2)
Se requerían cuarenta días para ello, porque éste es el tiempo requerido para el embalsamamiento. Y los Egipcios lo lloraron setenta días. (Génesis 50:3)
Cuando pasaron los días de luto por él, José habló a la casa de Faraón: "Si he hallado ahora gracia ante los ojos de ustedes, les ruego que hablen a Faraón, diciendo: (Génesis 50:4)

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Génesis 50:1 - Referencia Cruzada

Sara murió en Quiriat Arba, que es Hebrón, en la tierra de Canaán. Abraham fue a hacer duelo por Sara y a llorar por ella. (Génesis 23:2)
Cuando Eliseo se enfermó con la enfermedad de la cual había de morir, Joás, rey de Israel, descendió a él y lloró sobre su rostro, y dijo: "¡Padre mío, padre mío, los carros de Israel y sus hombres de a caballo!" (2 Reyes 13:14)
Pero no queremos, hermanos, que ignoren acerca de los que duermen (que han muerto), para que no se entristezcan como lo hacen los demás que no tienen esperanza. (1 Tesalonicenses 4:13)
Y ustedes, padres, no provoquen a ira a sus hijos, sino críenlos en la disciplina e instrucción del Señor. (Efesios 6:4)
Las enseñarás diligentemente a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. (Deuteronomio 6:7)
Fueron a la casa del oficial de la sinagoga, y Jesús vio el alboroto, y a los que lloraban y se lamentaban mucho. (Marcus 5:38)
Algunos hombres piadosos sepultaron a Esteban y lloraron a gran voz por él. (Hechos 8:2)
Yo descenderé contigo a Egipto, y ciertamente, Yo también te haré volver; y José cerrará tus ojos." (Génesis 46:4)
Jesús lloró. (Juan 11:35)