Espera en el SEÑOR y guarda Su camino, Y El te exaltará para que poseas la tierra. Cuando los impíos sean exterminados, tú lo verás.
(Salmos 37:34)
He visto al impío, violento, Extenderse como frondoso árbol en su propio suelo.
(Salmos 37:35)
Luego pasó, y ya no estaba; Lo busqué, pero no se pudo encontrar.
(Salmos 37:36)
Observa al que es íntegro, mira al que es recto; Porque el hombre de paz tendrá descendencia.
Pero los transgresores serán destruidos a una; La posteridad de los impíos será exterminada.
(Salmos 37:38)
Pero la salvación de los justos viene del SEÑOR; El es su fortaleza en el tiempo de la angustia.
(Salmos 37:39)
El SEÑOR los ayuda y los libra; Los libra de los impíos y los salva, Porque en El se refugian.
(Salmos 37:40)
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Salmos 37:37 - Referencia Cruzada
Había en Jerusalén un hombre que se llamaba Simeón. Este hombre, justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel, y el Espíritu Santo estaba sobre él.
(Lucas 2:25)
Y mientras lo apedreaban, Esteban invocaba al Señor y decía: "Señor Jesús, recibe mi espíritu."
(Hechos 7:59)
sabiendo que mi separación del cuerpo terrenal es inminente, tal como me lo ha declarado nuestro Señor Jesucristo.
(2 Pedro 1:14)
La obra de la justicia será paz, Y el servicio de la justicia, tranquilidad y confianza para siempre.
(Isaías 32:17)
El justo perece, y no hay quien se preocupe; Los hombres piadosos son arrebatados, sin que nadie comprenda. Porque el justo es arrebatado ante el mal,
(Isaías 57:1)
Hubo un hombre en la tierra de Uz llamado Job. Aquel hombre era intachable (íntegro), recto, temeroso de Dios y apartado del mal.
(Job 1:1)
El SEÑOR bendijo los últimos días de Job más que los primeros; y tuvo 14,000 ovejas, 6,000 camellos, 1,000 yuntas de bueyes y 1,000 asnas.
(Job 42:12)
Porque yo ya estoy para ser derramado como una ofrenda de libación, y el tiempo de mi partida ha llegado.
(2 Timoteo 4:6)
El impío es derribado por su maldad, Pero el justo tiene un refugio cuando muere.
(Proverbios 14:32)