Y el mayordomo les dijo: "No se preocupen, no teman. El Dios de ustedes y el Dios de su padre les ha dado ese tesoro en sus costales. Yo haré constar que recibí el dinero de ustedes." Entonces les sacó a Simeón. (Génesis 43:23)

Después el hombre llevó a los hombres a casa de José, y les dio agua y se lavaron los pies. También dio forraje a sus asnos. (Génesis 43:24)

Entonces prepararon el presente para la venida de José al mediodía, pues habían oído que iban a comer allí. (Génesis 43:25)

Cuando José regresó a su casa, ellos le trajeron a la casa el presente que traían en su mano y se postraron ante él en tierra.

Entonces él les preguntó cómo se encontraban, y añadió: "¿Cómo está su anciano padre de quien me hablaron? ¿Vive todavía?" (Génesis 43:27)

Su siervo nuestro padre está bien; todavía vive," contestaron. Y ellos se inclinaron en reverencia. (Génesis 43:28)

Al alzar José sus ojos y ver a su hermano Benjamín, hijo de su madre, les preguntó: "¿Es éste su hermano menor de quien me hablaron?" Y dijo: "Dios te imparta Su favor, hijo mío." (Génesis 43:29)

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Génesis 43:26 - Referencia Cruzada

Porque está escrito: "VIVO YO, DICE EL SEÑOR, QUE ANTE MI SE DOBLARA TODA RODILLA, Y TODA LENGUA ALABARA A DIOS." (Romanos 14:11)

Y se dijeron unos a otros: "Aquí viene el soñador. (Génesis 37:19)

Estábamos atando gavillas en medio del campo, y sucedió que mi gavilla se levantó y se puso derecha, y entonces las gavillas de ustedes se ponían alrededor y se inclinaban hacia mi gavilla." (Génesis 37:7)

Su siervo nuestro padre está bien; todavía vive," contestaron. Y ellos se inclinaron en reverencia. (Génesis 43:28)

Y José era el que mandaba en aquel país. El era quien vendía a todo el pueblo de la tierra. Cuando los hermanos de José llegaron, se postraron ante él rostro en tierra. (Génesis 42:6)

Sírvante pueblos, Y póstrense ante ti naciones; Sé señor de tus hermanos, E inclínense ante ti los hijos de tu madre. Malditos los que te maldigan, Y benditos los que te bendigan." (Génesis 27:29)

Dobléguense ante él los moradores del desierto, Y sus enemigos laman el polvo. (Salmos 72:9)

para que al nombre de Jesús SE DOBLE TODA RODILLA de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, (Filipenses 2:10)