Nueva Biblia Latinoamericana
Los Amonitas pagaron tributo a Uzías, y su fama se divulgó hasta la frontera de Egipto, pues llegó a ser muy poderoso. (2 Crónicas 26:8)
Uzías edificó torres en Jerusalén en la Puerta del Angulo, en la Puerta del Valle y en la esquina de la muralla, y las fortificó. (2 Crónicas 26:9)
Edificó también torres en el desierto y excavó muchas cisternas, porque tenía mucho ganado, tanto en las tierras bajas como en la llanura. También tenía labradores y viñadores en la región montañosa y en los campos fértiles porque amaba la tierra. (2 Crónicas 26:10)
Uzías tenía un ejército listo para la batalla, que salía al combate por divisiones conforme al número de su alistamiento, preparado por el escriba Jeiel y el oficial Maasías, bajo la dirección de Hananías, uno de los oficiales del rey.
El número total de los jefes de familia, guerreros valientes, era de 2,600. (2 Crónicas 26:12)
Y bajo su mando estaba un ejército poderoso de 307,500 que hacían la guerra con gran poder para ayudar al rey contra el enemigo. (2 Crónicas 26:13)
Uzías proveyó además a todo el ejército de escudos, lanzas, cascos, corazas, arcos y hondas para tirar piedras. (2 Crónicas 26:14)

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2 Crónicas 26:11 - Referencia Cruzada

Los Arameos, que habían salido en bandas, habían tomado cautiva a una muchacha muy joven de la tierra de Israel, y ella estaba al servicio de la mujer de Naamán. (2 Reyes 5:2)