No hay nadie más grande que yo en esta casa, y nada me ha rehusado excepto a usted, pues es su mujer. ¿Cómo entonces podría yo hacer esta gran maldad y pecar contra Dios?"
(Génesis 39:9)
Y ella insistía a José día tras día, pero él no accedió a acostarse con ella o a estar con ella.
(Génesis 39:10)
Pero un día que él entró en casa para hacer su trabajo, y no había ninguno de los hombres de la casa allí dentro,
(Génesis 39:11)
entonces ella tomó a José de la ropa, y le dijo: "¡Acuéstate conmigo!" Pero él le dejó su ropa en la mano, y salió huyendo afuera.
Cuando ella vio que él había dejado su ropa en sus manos y había huido afuera,
(Génesis 39:13)
llamó a los hombres de su casa y les dijo: "Miren, Potifar nos ha traído un Hebreo para que se burle de nosotros; vino a mí para acostarse conmigo, pero yo grité a gran voz.
(Génesis 39:14)
Cuando él oyó que yo alzaba la voz y gritaba, dejó su ropa junto a mí y salió huyendo afuera."
(Génesis 39:15)
Otras publicaciones relacionadas con "Génesis 39:12":
Génesis 39:12 - Referencia Cruzada
Cierto joven seguía a Jesús, vestido sólo con una sábana sobre su cuerpo desnudo; y lo prendieron;
(Marcus 14:51)
Huye, pues, de las pasiones juveniles y sigue (busca) la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que invocan al Señor con un corazón puro.
(2 Timoteo 2:22)
Aleja de la extraña tu camino, Y no te acerques a la puerta de su casa;
(Proverbios 5:8)
Amados, les ruego como a extranjeros y peregrinos, que se abstengan de las pasiones carnales que combaten contra el alma.
(1 Pedro 2:11)
Y hallé más amarga que la muerte A la mujer cuyo corazón es lazos y redes, Cuyas manos son cadenas. El que agrada a Dios escapará de ella, Pero el pecador será por ella apresado.
(Eclesiastés 7:26)
Cuando Samuel se volvía para irse, Saúl asió el borde de su manto, y éste se rasgó.
(1 Samuel 15:27)
Y ella insistía a José día tras día, pero él no accedió a acostarse con ella o a estar con ella.
(Génesis 39:10)
¡Qué débil es tu corazón," declara el Señor DIOS, "cuando haces todas estas cosas, las acciones de una ramera desvergonzada!
(Ezequiel 16:30)
Líbrate como la gacela de la mano del cazador Y como ave de la mano del que caza.
(Proverbios 6:5)
No se dejen engañar: "Las malas compañías corrompen las buenas costumbres."
(1 Corintios 15:33)
Así que ella lo agarra y lo besa, Y descarada le dice:
(Proverbios 7:13)
Pero él rehusó y dijo a la mujer de su amo: "Estando yo aquí, mi amo no se preocupa de nada en la casa, y ha puesto en mi mano todo lo que posee.
(Génesis 39:8)
Hijo mío, no andes en el camino con ellos. Aparta tu pie de su senda,
(Proverbios 1:15)