Nueva Biblia Latinoamericana
Los demás hechos de Ezequías y todo su poderío, y cómo hizo el estanque y el acueducto, y trajo agua a la ciudad, ¿no están escritos en el Libro de las Crónicas de los reyes de Judá? (2 Reyes 20:20)
Y durmió Ezequías con sus padres; y su hijo Manasés reinó en su lugar. (2 Reyes 20:21)
Manasés tenía doce años cuando comenzó a reinar, y reinó cincuenta y cinco años en Jerusalén. El nombre de su madre era Hepsiba. (2 Reyes 21:1)
Hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, conforme a las abominaciones de las naciones que el SEÑOR había desposeído delante de los Israelitas.
Porque reedificó los lugares altos que su padre Ezequías había destruido; levantó también altares a Baal e hizo una Asera (deidad femenina), como había hecho Acab, rey de Israel, y adoró a todo el ejército de los cielos y los sirvió. (2 Reyes 21:3)
Edificó además altares en la casa del SEÑOR, de la cual el SEÑOR había dicho: "En Jerusalén pondré Mi nombre." (2 Reyes 21:4)
Edificó altares a todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la casa del SEÑOR. (2 Reyes 21:5)

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2 Reyes 21:2 - Referencia Cruzada

Además, Manasés derramó muchísima sangre inocente hasta llenar a Jerusalén de un extremo a otro, aparte de su pecado con el que hizo pecar a Judá para que hiciera lo malo ante los ojos del SEÑOR. (2 Reyes 21:16)
Pero hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR conforme a las abominaciones de las naciones que el SEÑOR había expulsado delante de los Israelitas. (2 Crónicas 33:2)
Y los haré motivo de espanto para todos los reinos de la tierra, a causa de Manasés, hijo de Ezequías, rey de Judá, por lo que hizo en Jerusalén. (Jeremías 15:4)
No procederás así para con el SEÑOR tu Dios, porque toda acción abominable que el SEÑOR odia, ellos la han hecho en honor de sus dioses; porque aun a sus hijos y a sus hijas queman en el fuego en honor a sus dioses. (Deuteronomio 12:31)
Colocó la imagen tallada de Asera (deidad femenina) que él había hecho, en la casa de la cual el SEÑOR había dicho a David y a su hijo Salomón: "En esta casa y en Jerusalén, que he escogido de entre todas las tribus de Israel, pondré Mi nombre para siempre. (2 Reyes 21:7)
Porque esta tierra se ha corrompido, por tanto, he castigado su iniquidad sobre ella, y la tierra ha vomitado a sus moradores. (Levítico 18:25)
Asimismo todos los jefes de los sacerdotes y el pueblo fueron infieles en gran manera, y siguieron todas las abominaciones de las naciones, y profanaron la casa del SEÑOR que El había consagrado en Jerusalén. (2 Crónicas 36:14)
Acaz tenía veinte años cuando comenzó a reinar, y reinó dieciséis años en Jerusalén; pero no hizo lo recto ante los ojos del SEÑOR su Dios como su padre David había hecho. (2 Reyes 16:2)
Ni aún Samaria ha cometido ni la mitad de tus pecados, pues tú has multiplicado tus abominaciones más que ellas, y has hecho aparecer justas a tus hermanas con todas las abominaciones que has cometido. (Ezequiel 16:51)
Por cuanto Me han abandonado y han quemado incienso a otros dioses para provocarme a ira con toda la obra de sus manos, por tanto Mi ira arde contra este lugar y no se apagará."' (2 Reyes 22:17)