Su presencia
Faustino de Jesús Zamora VargasEl glorioso ministerio del Espíritu Santo existe para hacernos saber que la presencia de Dios en nosotros es real. El habita en nosotros para acreditar permanentemente la existencia de la Verdad, su omnipresencia; es Dios mismo guardando a sus hijos en la batalla cotidiana
que implica vivir en un mundo al cual ya no pertenecemos. David lo sabía y por eso su clamor era justificado. Nadie puede huir de la presencia de Dios. Por mucho que intentemos esconder las apariencias causadas por la mordaz picadura del pecado, Él está ahí; su Espíritu gime, espera tu arrepentimiento, pero no te abandona. “En mi confusión llegué a decir: -¡He sido arrojado de tu presencia!-Pero tú oíste mi voz suplicante cuando te pedí que me ayudaras” (Sal 31.22)