La relación entre Jesus y su mamá
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
En este pasaje de las bodas de Caná, vemos una relación saludable entre Jesús y su madre María. Aprendemos que es importante que los hijos mantengan una relación intencional con sus padres y compartan experiencias sociales con ellos. También vemos que hay un balance en la relación entre Jesús y su madre, entre independencia e intimidad, sujeción y autoridad, y ejerciendo privilegios pero respetando limitaciones. La relación familiar apropiada es una danza delicada que requiere buscar un balance dinámico.
La relación familiar es como una danza delicada que requiere un balance dinámico entre padres e hijos. Es importante reconocer la independencia y autoridad de los hijos cuando llegan a la edad adulta, pero también mantener ciertos privilegios de padres. Jesús y su madre tienen una tensión constructiva y amorosa en la que ella lo presiona un poco, pero él aclara sus planes y finalmente condesciende con ella. Es importante honrar y complacer a los padres y autoridades, incluso cuando no estamos plenamente de acuerdo con ellos.
El autor habla sobre el valor de honrar a nuestras autoridades, especialmente a las madres, y cómo esto puede llevar a una relación sana y próspera. Él usa el ejemplo de Jesús y María en las bodas de Caná para mostrar cómo su relación equilibrada y respetuosa trajo bendición a ellos y a la comunidad. El autor también enfatiza la importancia de mantener límites saludables en las relaciones familiares y aprender a escuchar y aprender de nuestros hijos. En resumen, el autor insta a las personas a honrar a sus autoridades y a construir relaciones familiares saludables para el bien de todos.Quiero invitarlos a buscar conmigo un pasaje conocidísimo en el Evangelio según San Juan, en el Capítulo 2, versículos del 1 al 11, el famoso pasaje de la bodas de Caná.
Dice allí, “ Al tercer día se hicieron una bodas en Caná de Galilea y estaba allí la madre de Jesús y fueron también invitados a las bodas Jesús y sus discípulos, y faltando el vino la madre de Jesús le dijo, ‘No tienen vino’, Jesús le dijo, ‘¿qué tienes conmigo, mujer, aún no ha venido mi hora?’. Su madre dijo a los que servían, ‘haced todo lo que os dijere’. Y estaban allí seis tinajas de piedra para agua conforme al rito de la purificación de los judíos, en cada una de las cuales cabían dos o tres cántaros. Jesús les dijo, ‘llenad estas tinajas de agua’, y las llenaron hasta arriba. Entonces les dijo ‘sacad ahora y llevadlo al maestresala’. Y se lo llevaron. Cuando el maestresala probó el agua hecha vino, sin saber él de dónde era, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo y le dijo, ‘todo hombre sirve primero el buen vino, y cuando ya han bebido mucho, entonces el inferior, más tu has reservado el buen vino hasta ahora’. Este principio de señales hizo Jesús en Caná de Galilea y manifestó su gloria y sus discípulos creyeron en él.”