Mi Dios es renunciación
Milagros García KlibanskyDesde finales de noviembre, en todas partes del mundo comienzan las ventas de Navidad. Cuba no escapa de esto, la mentalidad del consumismo nos ha alcanzado e inmersos en este mar de luces y adornos nos diluimos un poco y comenzamos a soñar. Aparecen las "rebajas" de aparatos electrodomésticos
y aun con los salarios irrisorios de nuestro país, hay personas que han logrado guardar, durante el año, incluso años, algún dinerito para comprar lo “necesario” y de esta forma creen tener el “espíritu navideño”.