Vivir una vida esperando al amo
Gregory Bishop
(Audio: Español)
RESUMEN: En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de estar enfocados en las cosas de Dios en un mundo lleno de distracciones y tentaciones. Se enfoca en el texto de Primera de Pedro 1:13-20, donde el Apóstol Pedro exhorta a los creyentes a estar alerta y enfocados en la venida de Cristo. El pastor explica el significado de la frase "ceñid los lomos de vuestro entendimiento" y la importancia de estar sobrios y atentos para poder estar preparados para el regreso de Cristo. También habla sobre la necesidad de tener una perspectiva más amplia y enfocarse en la meta final en lugar de solo en las luchas diarias. El pastor anima a los creyentes a mantenerse despiertos y enfocados en Dios en todo momento.
En este sermón, el pastor habla sobre la venida de Jesucristo y cómo debemos prepararnos para su llegada. Él explica que Jesús volverá desde los cielos y se manifestará en la tierra rodeado de ángeles en una nube de fuego. También habla sobre cómo los cielos son una dimensión invisible y espiritual y cómo los cristianos habitan en ambos mundos. El pastor explica que cuando Jesús vuelva, los cristianos serán transformados y manifestados en su gloria. Él enfatiza que debemos ser santos y vivir con nuestros ojos puestos en la gloria que nos espera en el futuro.
El orador habla sobre la gloria de Dios y la manifestación de Jesús en el futuro. Exhorta a los oyentes a vivir una vida santa y estar preparados para los momentos de sufrimiento y tentación. Pide a Dios que les dé la fuerza y la concentración necesarias para ser un pueblo santo y estar listos para cuando Jesús sea manifestado en gloria.
En este sermón, el pastor habla sobre la venida de Jesucristo y cómo debemos prepararnos para su llegada. Él explica que Jesús volverá desde los cielos y se manifestará en la tierra rodeado de ángeles en una nube de fuego. También habla sobre cómo los cielos son una dimensión invisible y espiritual y cómo los cristianos habitan en ambos mundos. El pastor explica que cuando Jesús vuelva, los cristianos serán transformados y manifestados en su gloria. Él enfatiza que debemos ser santos y vivir con nuestros ojos puestos en la gloria que nos espera en el futuro.
El orador habla sobre la gloria de Dios y la manifestación de Jesús en el futuro. Exhorta a los oyentes a vivir una vida santa y estar preparados para los momentos de sufrimiento y tentación. Pide a Dios que les dé la fuerza y la concentración necesarias para ser un pueblo santo y estar listos para cuando Jesús sea manifestado en gloria.
Yo les animo a abrir sus Biblias a Primera de Pedro, capítulo 1, casi al final del Nuevo Testamento, versículo 13. Eso yo sentí del Señor como asignado a predicar de eso. No es parte de una serie que estoy haciendo pero sentí al Señor guiarme a través de varias circunstancias a hablar de este texto que vamos a reflexionar juntos. Comenzando en versículo 13, la palabra de Dios dice:
“… Por tanto ceñid los lomos de vuestro entendimiento, – vamos a tomar tiempo de hablar de eso – sed sobrios y esperad por completo la gracia que os traerá cuando Jesucristo sea manifestado. Como hijos obedientes no os conforméis a los deseos que antes teníais cuando en vuestra ignorancia, sino como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir. Porque escrito está sed santos, porque yo soy santo. Y si invocáis por padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación, sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres no con cosas corruptibles como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación ya destinado desde antes de la fundación del mundo pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros.”
“… Por tanto ceñid los lomos de vuestro entendimiento, – vamos a tomar tiempo de hablar de eso – sed sobrios y esperad por completo la gracia que os traerá cuando Jesucristo sea manifestado. Como hijos obedientes no os conforméis a los deseos que antes teníais cuando en vuestra ignorancia, sino como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir. Porque escrito está sed santos, porque yo soy santo. Y si invocáis por padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación, sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres no con cosas corruptibles como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación ya destinado desde antes de la fundación del mundo pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros.”
