La tibieza - La tentación muy efectiva del diablo
Gregory Bishop(Audio: Español)
RESUMEN:
En el mensaje de Jesús a la iglesia de Laodicea en Apocalipsis 3, vemos cómo la tibieza es una tentación muy efectiva del diablo, ya que nos hace olvidar de Dios y buscar la felicidad en cosas del mundo. La iglesia de Laodicea era rica y auto suficiente, pero se olvidó de Dios y se volvió tibia. Jesús les dice que ojalá fueran fríos o calientes, pero al ser tibios, los vomitará de su boca. Él les aconseja que compren oro refinado en el fuego, vestiduras blancas y colirio para que vean. Jesús es el amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios. Todo lo demás en esta vida es un placer a medias, un placer falso. Solo Dios puede llenar el vacío del alma humana, y Él sabe lo que nos hará felices. Debemos disfrutar la vida, pero sabiendo que hay un Creador que de verdad nos llena. Todos los hombres y mujeres de Dios que han tenido un impacto en el mundo y en los cielos tienen en común su fanatismo por la presencia de Dios. Debemos ser como Moisés,
El orador explica que debemos buscar un hambre espiritual por las cosas de Dios y no conformarnos con las riquezas terrenales. Jesús nos ofrece gozo, vestiduras finas y colirio para los ojos, pero necesitamos tener ojos de fe para buscarlo. El servicio del Señor no es un deber, sino un privilegio, y debemos buscar el gozo de Dios en él. El ayuno es una forma de cultivar el hambre espiritual, pero no hay reglas específicas, cada persona debe encontrar su propia forma de hacerlo con el corazón en el lugar correcto.
El ayuno es una decisión personal de buscar a Dios, no hay reglas específicas, cada uno debe escoger cómo hacerlo. Dios anhela estar cerca de nosotros y comer con nosotros, así como lo hizo con los patriarcas, Moisés y Jesús con los pecadores y recaudadores de impuestos. A través del ayuno, nos enfocamos en las cosas del Señor y cultivamos nuestro gusto por él. En la cena de las bodas del cordero, tendremos un lugar especial y Dios no quiere que pasemos hambre mientras esperamos ese momento. Fuimos creados para ser reyes y reinas en el Reino de Dios y representar su gloria en este mundo. Al final, seremos coronados y reinaremos con Jesús. Como iglesia, debemos ser vencedores y estar sentados con Cristo en lugares celestiales. Comencemos a buscar más de Dios en 2017 con todo nuestro corazón.Hoy terminamos la serie de mensajes que estamos pensando en estos días en el libro de Apocalipsis, capítulo 3, que son las cartas escritas por el Apóstol Juan, pero habladas por el Señor Jesucristo directamente a las iglesias. Cada carta es un mensaje personal para nosotros como iglesia de cómo nosotros podemos estar pendientes a los ataques del diablo, cómo podemos ser una iglesia vencedoras, cómo podemos llegar a ser todo lo que Dios quiere que seamos en los últimos días.
El Señor guarda lo mejor para el último, así vamos a mirar en el libro de Apocalipsis, capítulo 3 el mensaje de Jesús a la iglesia en la Odisea. Apocalipsis 3, versículo 14, comienza con estas palabras: