Jesús te encuentra donde estas

(Audio: Español)

RESUMEN: La pastora Mercedes López Miranda comparte su experiencia sobre cómo se encontró con Jesús. Llegó a Boston a los 24 años y conoció a una pareja cristiana que la evangelizó. Aunque ella tenía una educación católica, nunca había conocido a Dios de manera personal. Después de conocer a esta pareja y a su esposo, comenzó a interesarse en conocer a Jesús. Fue un proceso gradual de comprensión, hasta que llegó un momento en el que ella decidió entregarle su corazón a Dios. Aunque al principio ella amaba a Dios solo con su mente y no podía expresar sus sentimientos, con el tiempo ella aprendió a amarlo completamente. La pastora también compartió la historia de Pedro y cómo su experiencia se relaciona con la suya. Para estar alerta a la cercanía de Jesús, la pastora dice que es importante tener disciplina y expectativa en la oración y en creer que Dios contesta la oración.

La pastora comparte su experiencia personal de cómo la oración y el don de lenguas la llevó a tener un trato personal con Dios y a sentir su amor de padre. Anima a los oyentes a buscar a Dios a través de la lectura de la Palabra, la congregación y el consejo de otros. También enfatiza la accesibilidad de Dios y la importancia de acercarse a su trono de gracia para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. La oración final es por la iglesia y por la oportunidad de ser ejemplos para otros en su caminar con Dios.

Estamos continuando nuestra serie Háblanos de Jesús, y en esta noche tan especial tenemos la visita, la presencia de la pastora Mercedes López Miranda, Meche como la conocemos con tanto aprecio, Meche, ¿si quieres saludar a la iglesia?


Pastora: Para mí es un gozo estar aquí, no hay nada mejor que hablar de nuestro Jesús, y podríamos estar hablando continuamente de Él. Yo soy una mujer agradecida, yo sé que Dios sacó mis pies del lodo senagozo y los puso sobre piedra, y sabemos que esa piedra es Cristo Jesús. Así que yo creo que yo no comienzo ninguna oración en ninguno de mis días que no sea con un Señor gracias, estoy agradecida profundamente por su salvación más que nada, lo demás es por añadidura, fué una ñapa que el Señor sigue dándome cada día y nos sigue dando a nosotros cada día, pero es el agradecimiento por lo que Él ha hecho, sacó a cada uno de nosotros de la oscuridad de las tinieblas y nos ha traído a esta aventura, hace poco cantábamos una canción acerca de la aventura, y así mismo es el caminar cristiano, es una aventura, nunca se pone aburrido, nunca se estanca, si uno sigue buscando de él sigue recibiendo algo nuevo cada día, si estamos en la expectativa de que vamos a recibir y vamos a él con fé.