El Dios que nos prueba
Gregory Bishop(Audio: Español)
RESUMEN:
En Mateo 1:18, se relata el embarazo divino de María y cómo José se enteró de ello. José, el padre terrenal de Jesús, fue probado por Dios al descubrir que su prometida estaba embarazada y decidir qué hacer al respecto. Él decidió protegerla y divorciarse calladamente, pero luego el ángel Gabriel le dijo en un sueño que no temiera casarse con ella, porque lo que había en ella era del Espíritu Santo. Dios quería ver cómo José manejaría la situación y si él sería un hombre digno de cuidar y proteger a su Hijo en la tierra. La prueba fortaleció su fe y lo preparó para enfrentar los peligros que vendrían.
La Biblia dice que Dios prueba los corazones, y las pruebas nos entrenan, nos preparan y nos pulen para que brillemos como el oro. El Señor nos prueba para enseñarnos humildad, para hacernos compasivos con los demás y para recordarnos que no somos tan fuertes como pensamos que somos. Las pruebas también nos ayudan a echar raíces profundas en Dios y a estar listos para enfrentar las batallas que vendrán. Dios es como un buen coach que nos entrena con las pruebas para que estemos listos para ganar el juego de la vida.
Dios nos prueba de diferentes maneras, como decisiones que tenemos que tomar, responsabilidades que nos da, y situaciones difíciles. Él quiere saber si somos fieles para poder confiarnos más. A veces, Dios permite que el diablo nos tiente para hacernos más fuertes. El desierto es el salón de prueba que Dios prefiere usar, donde nos hace pasar por situaciones difíciles para enseñarnos a confiar en Él. Nuestro desierto puede ser cualquier situación difícil que estemos enfrentando. Abraham fue probado cuando Dios le pidió sacrificar a su hijo Isaac, pero Abraham confiaba en que Dios podía levantarlo de entre los muertos. Dios nos quiere hacer más fuertes para poder usarnos de maneras más grandes.
La prueba de nuestra fe produce paciencia y nos acerca más a Dios. Abraham, Jacob, José, David y Jesús fueron probados y conocieron a Dios de una manera nueva y poderosa. Si somos probados, debemos tener paciencia y perseverancia sabiendo que Dios es fiel y nos ayudará. Si resistimos la prueba, recibiremos la corona de la vida. El mejor está por venir para aquellos que han sido probados y conocen a un Dios fuerte.Mateo 1:18 dice así: “El nacimiento de Jesucristo fue así. Estando desposada María, su madre, con José antes que se juntasen se halló que había concebido del Espíritu Santo. José, su marido, como era justo y no quería infamarla quiso dejarla secretamente y pensando él en esto he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo, “José, hijo de David, no temas recibir a María, tu mujer, porque lo que en ella se ha engendrado del Espíritu Santo es y dará a luz un niño y llamará su nombre Jesús porque él salvará a su pueblo de sus pecados.”
Padre, gracias, que tu eres sabio, Señor y tu sabes hacer las cosas. Gracias que tus caminos a veces no son nuestros caminos ni tus pensamientos como nuestros pensamientos pero tu sabes lo que estás haciendo. Gracias por la manera sabia que tu organizaste que naciera tu Hijo en este mundo y gracias que tu eres el mismo ayer, hoy y para siempre y que tu también tratas con nosotros con sabiduría y con un plan especial para cada uno de nosotros. Te pido que bendigas este tiempo, que escuchemos la voz del buen pastor en el nombre de Jesús. Amén.