Luego entra y cierra la puerta detrás de ti y de tus hijos y echas el aceite en todas estas vasijas, poniendo aparte las que estén llenas."
(2 Kings 4:4)Y ella se fue de su lado, y cerró la puerta tras sí y de sus hijos; y ellos traían las vasijas y ella echaba el aceite.
(2 Kings 4:5)Cuando las vasijas estuvieron llenas, ella dijo a un hijo suyo: "Tráeme otra vasija." Y él le dijo: "No hay más vasijas." Y cesó el aceite.
(2 Kings 4:6)Entonces ella fue y se lo contó al hombre de Dios. Y él le dijo: "Ve, vende el aceite y paga tu deuda, y tú y tus hijos pueden vivir de lo que quede."
Un día pasaba Eliseo por Sunem, donde había una mujer distinguida, y ella lo persuadió a que comiera. Y sucedía que siempre que pasaba, entraba allí a comer.
(2 Kings 4:8)Y ella dijo a su marido: "Ahora entiendo que éste que siempre pasa por nuestra casa, es un santo hombre de Dios.
(2 Kings 4:9)Te ruego que hagamos un pequeño aposento alto, con paredes, y pongamos allí para él una cama, una mesa, una silla y un candelero; y cuando venga a nosotros, se podrá retirar allí."
(2 Kings 4:10)Other publications related to "2 Kings 4:7":
2 Kings 4:7 - Cross Reference
Pero la palabra de Dios vino a Semaías, hombre de Dios, diciendo:
(1 Kings 12:22)Nunca paguen a nadie mal por mal. Respeten (Consideren) lo bueno delante de todos los hombres.
(Romans 12:17)El impío pide prestado y no paga, Pero el justo es compasivo y da.
(Psalm 37:21)Porque recuerdan, hermanos, nuestros trabajos y fatigas, cómo, trabajando de día y de noche para no ser carga a ninguno de ustedes, les proclamamos el evangelio de Dios.
(1 Thessalonians 2:9)Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable, si hay alguna virtud o algo que merece elogio, en esto mediten.
(Philippians 4:8)Pues ustedes mismos saben cómo deben seguir nuestro ejemplo (cómo imitarnos), porque no obramos de manera indisciplinada entre ustedes,
(2 Thessalonians 3:7)a fin de que se conduzcan (vivan) honradamente para con los de afuera, y no tengan necesidad de nada.
(1 Thessalonians 4:12)