Nueva Biblia Latinoamericana
Pero él se puso en medio del terreno, lo defendió e hirió a los Filisteos; y el SEÑOR le concedió una gran victoria. (2 Samuel 23:12)
Descendieron tres de los treinta jefes y fueron a David en la cueva de Adulam al tiempo de la cosecha, mientras la tropa de los Filisteos acampaba en el Valle de Refaím. (2 Samuel 23:13)
David estaba entonces en la fortaleza, mientras la guarnición de los Filisteos estaba en Belén (Casa del Pan). (2 Samuel 23:14)
David sintió un gran deseo, y dijo: "¡Quién me diera a beber agua del pozo de Belén que está junto a la puerta!"
Entonces los tres valientes se abrieron paso por el campamento de los Filisteos, y sacando agua del pozo de Belén que estaba junto a la puerta, se la llevaron y la trajeron a David. Pero él no quiso beberla, sino que la derramó para el SEÑOR, (2 Samuel 23:16)
y dijo: "Lejos esté de mí, oh SEÑOR, que yo haga esto. ¿Beberé la sangre de los hombres que fueron con riesgo de sus vidas?" Por eso no quiso beberla. Estas cosas hicieron los tres valientes. (2 Samuel 23:17)
Y Abisai, hermano de Joab, hijo de Sarvia, era jefe de los treinta. Y éste blandió su lanza contra 300 y los mató, y tuvo tanto renombre como los tres. (2 Samuel 23:18)

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2 Samuel 23:15 - Cross Reference

El populacho que estaba entre ellos tenía un deseo insaciable; y también los Israelitas volvieron a llorar, y dijeron: "¿Quién nos dará carne para comer? (Numbers 11:4)
pero el que beba del agua que Yo le daré, no tendrá sed jamás, sino que el agua que Yo le daré se convertirá en él en una fuente de agua que brota para vida eterna." (John 4:14)
En el último día, el gran día de la fiesta, Jesús puesto en pie, exclamó en alta voz: "Si alguien tiene sed, que venga a Mí y beba. (John 7:37)
Salmo de David, cuando estaba en el desierto de Judá. Oh Dios, Tú eres mi Dios; Te buscaré con afán. Mi alma tiene sed de Ti, mi carne Te anhela Cual tierra seca y árida donde no hay agua. (Psalm 63:1)
Jesús le respondió: "Si tú conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: 'Dame de beber,' tú Le habrías pedido a El, y El te hubiera dado agua viva." (John 4:10)
Para el director del coro. Masquil de los hijos de Coré. Como el ciervo anhela las corrientes de agua, Así suspira por Ti, oh Dios, el alma mía. (Psalm 42:1)
Caf. Mi alma desfallece por Tu salvación; En Tu palabra espero. (Psalm 119:81)
Los afligidos y los necesitados buscan agua, pero no la hay, Su lengua está reseca de sed. Yo, el SEÑOR, les responderé, Yo, el Dios de Israel, no los abandonaré. (Isaiah 41:17)
Porque derramaré agua sobre la tierra sedienta, Y torrentes sobre la tierra seca. Derramaré Mi Espíritu sobre tu posteridad, Y Mi bendición sobre tus descendientes. (Isaiah 44:3)