Nueva Biblia Latinoamericana
Partió, pues, el mensajero, y llegó e informó a David todo lo que Joab le había enviado a decir. (2 Samuel 11:22)
Y el mensajero dijo a David: "Los hombres prevalecieron contra nosotros y salieron al campo contra nosotros, pero los rechazamos hasta la entrada de la puerta. (2 Samuel 11:23)
Pero los arqueros tiraron contra sus siervos desde la muralla; y algunos de los siervos del rey han muerto, y también su siervo Urías el Hitita ha muerto." (2 Samuel 11:24)
Entonces David dijo al mensajero: "Así dirás a Joab: 'No tengas pesar por esto, porque la espada devora tanto a uno como al otro. Haz más fuerte tu combate contra la ciudad y destrúyela'; y tú aliéntalo."
Al oír la mujer de Urías que su marido Urías había muerto, hizo duelo por su marido. (2 Samuel 11:26)
Cuando pasó el luto, David mandó traerla a su casa, y ella fue su mujer; y dio a luz un hijo. Pero lo que David había hecho fue malo a los ojos del SEÑOR. (2 Samuel 11:27)
Entonces el SEÑOR envió a Natán a David. Y Natán vino a él y le dijo: "Había dos hombres en una ciudad, el uno rico, y el otro pobre. (2 Samuel 12:1)

Other publications related to "2 Samuel 11:25":

Brandt Gillespie
David cries out
Explore the struggles and redemption of David, a man after God's own heart, and learn how his journey can inspire your own transformation.


Charles Spurgeon
The Lord is able to stop all the enemies of His people
Article about how the Lord is able to stop all the enemies of His people and how we should trust in Him and not fear until the enemy actually comes.


2 Samuel 11:25 - Cross Reference

Pues bien, he tomado todas estas cosas en mi corazón y declaro todo esto: que los justos y los sabios y sus hechos están en la mano de Dios. Los hombres no saben ni de amor ni de odio, aunque todo está delante de ellos. (Ecclesiastes 9:1)
¡Ah, Señor! ¿Qué puedo decir, ya que Israel ha vuelto la espalda ante sus enemigos? (Joshua 7:8)
Y observen bien: si sube por el camino de su territorio a Bet Semes, entonces El nos ha hecho este gran mal. Pero si no, entonces sabremos que no fue Su mano la que nos hirió; nos sucedió por casualidad." (1 Samuel 6:9)
Vi además que bajo el sol No es de los ligeros la carrera, Ni de los valientes la batalla; Y que tampoco de los sabios es el pan, Ni de los entendidos las riquezas, Ni de los hábiles el favor, Sino que el tiempo y la suerte les llegan a todos. (Ecclesiastes 9:11)
Joab combatió contra Rabá, ciudad de los Amonitas, y conquistó la ciudad real. (2 Samuel 12:26)