para que viniera la violencia hecha a los setenta hijos de Jerobaal, y recayera la sangre de ellos sobre su hermano Abimelec que los mató, y sobre los habitantes de Siquem que fortalecieron las manos de él para matar a sus hermanos.
(Judges 9:24)Los habitantes de Siquem pusieron emboscadas contra él en las cumbres de los montes y robaban a todos los que pasaban cerca de ellos por el camino; y se lo hicieron saber a Abimelec.
(Judges 9:25)Gaal, hijo de Ebed, vino con sus parientes, y pasaron a Siquem; y los habitantes de Siquem pusieron su confianza en él.
(Judges 9:26)Y salieron al campo y vendimiaron sus viñedos, pisaron las uvas e hicieron fiesta. Y entrando a la casa de su dios, comieron y bebieron y maldijeron a Abimelec.
Entonces Gaal, hijo de Ebed, dijo: "¿Quién es Abimelec y quién es Siquem para que le sirvamos? ¿No es acaso hijo de Jerobaal, y no es Zebul su oficial? Sirvan a los hombres de Hamor, padre de Siquem; pero ¿por qué hemos de servirle a él?
(Judges 9:28)¡Quién pusiera este pueblo en mis manos! Entonces yo quitaría a Abimelec." Diría a Abimelec: "Aumenta tu ejército, y sal."
(Judges 9:29)Cuando Zebul, gobernante de la ciudad, oyó las palabras de Gaal, hijo de Ebed, se encendió en ira.
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Judges 9:27 - Cross Reference
Los príncipes de los Filisteos se reunieron para ofrecer un gran sacrificio a su dios Dagón, y para regocijarse, pues decían: "Nuestro dios ha entregado a nuestro enemigo Sansón en nuestras manos."
(Judges 16:23)También amaba la maldición, y ésta vino sobre él; No se deleitó en la bendición, y ella se alejó de él.
(Psalm 109:17)Por eso lloraré amargamente por Jazer, por la viña de Sibma. Te bañaré con mis lágrimas, oh Hesbón y Eleale, Porque sobre tus frutos de verano y sobre tu cosecha se ha extinguido el clamor,
(Isaiah 16:9)Por eso aquel día, el Señor, DIOS de los ejércitos, los llamó a llanto y a lamento, A raparse la cabeza y a vestirse de cilicio.
(Isaiah 22:12)Al morir Gedeón, los Israelitas volvieron a prostituirse con los baales e hicieron a Baal Berit su dios.
(Judges 8:33)Belsasar, rey de Babilonia ofreció un gran banquete a mil de sus nobles, y en presencia de los mil se puso a beber vino.
(Daniel 5:1)¿Alejan ustedes el día de la calamidad, Y acercan la silla de la violencia?
(Amos 6:3)Tal como ocurrió en los días de Noé, así será también en los días del Hijo del Hombre.
(Luke 17:26)El vino nuevo está de duelo, Desfallece la vid, Suspiran todos los de alegre corazón.
(Isaiah 24:7)Tan pronto como Moisés se acercó al campamento, vio el becerro y las danzas. Se encendió la ira de Moisés, arrojó las tablas de sus manos, y las hizo pedazos al pie del monte.
(Exodus 32:19)Y el hijo de la Israelita blasfemó el Nombre, y maldijo. Entonces lo llevaron a Moisés. (El nombre de su madre era Selomit, hija de Dibri, de la tribu de Dan.)
(Leviticus 24:11)Y el Filisteo dijo a David: "¿Acaso soy un perro, que vienes contra mí con palos?" Y el Filisteo maldijo a David por sus dioses.
(1 Samuel 17:43)Le dieron setenta piezas de plata de la casa de Baal Berit, con las cuales Abimelec tomó a sueldo hombres indignos y temerarios que lo siguieron.
(Judges 9:4)sino que se ha ensalzado usted contra el Señor del cielo. Y han traído delante de usted los vasos de Su templo, y usted y sus nobles, sus mujeres y sus concubinas, han estado bebiendo vino en ellos y han alabado a los dioses de plata y oro, de bronce, hierro, madera y piedra, que ni ven, ni oyen, ni entienden. Pero al Dios que tiene en Su mano su propio aliento y es dueño de todos sus caminos, no ha glorificado.
(Daniel 5:23)Al día siguiente se levantaron temprano y ofrecieron holocaustos y trajeron ofrendas de paz. El pueblo se sentó a comer y a beber, y se levantó a regocijarse.
(Exodus 32:6)Al oír esto todos los habitantes de la torre de Siquem, se metieron en la fortaleza del templo de El Berit.
(Judges 9:46)Y diré a mi alma: alma, tienes muchos bienes depositados para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete.'
(Luke 12:19)Tú, pues, profetizarás contra ellos todas estas palabras, y les dirás: 'El SEÑOR rugirá desde lo alto, Y dará Su voz desde Su santa morada; Rugirá fuertemente contra Su rebaño. Dará gritos como los que pisan las uvas Contra todos los habitantes de la tierra.
(Jeremiah 25:30)