Nueva Biblia Latinoamericana
Después dijo a Zeba y a Zalmuna: "¿Qué clase de hombres eran los que ustedes mataron en Tabor?" "Eran como tú," respondieron ellos, "cada uno parecía hijo de rey." (Judges 8:18)
Eran mis hermanos," dijo él, "hijos de mi madre. Vive el SEÑOR, que si los hubieran dejado con vida, yo no les quitaría la vida a ustedes." (Judges 8:19)
Y dijo a Jeter su primogénito: "Levántate y mátalos." Pero el joven no sacó la espada porque tenía temor, pues todavía era muchacho. (Judges 8:20)
Entonces Zeba y Zalmuna dijeron: "Levántate tú y cae sobre nosotros; porque como es el hombre, así es su fortaleza (valentía)." Y se levantó Gedeón y mató a Zeba y a Zalmuna, y tomó los adornos de media luna que sus camellos llevaban al cuello.
Los hombres de Israel le dijeron a Gedeón: "Reina sobre nosotros, tú y tus hijos, y también el hijo de tu hijo, porque nos has librado de la mano de Madián." (Judges 8:22)
Pero Gedeón les respondió: "No reinaré sobre ustedes, ni tampoco reinará sobre ustedes mi hijo. El SEÑOR reinará sobre ustedes." (Judges 8:23)
Quisiera pedirles," Gedeón les dijo, "que cada uno de ustedes me dé un zarcillo de su botín" (pues tenían zarcillos de oro, porque eran Ismaelitas). (Judges 8:24)

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Judges 8:21 - Cross Reference

En aquel día el Señor les quitará los adornos: las ajorcas los tocados y lunetas, (Isaiah 3:18)
El peso de los zarcillos de oro que él pidió fue de 1,700 siclos (19.4 kilos) de oro, sin contar los adornos de media luna, los pendientes y los vestidos de púrpura que llevaban los reyes de Madián y sin contar los collares que llevaban sus camellos al cuello. (Judges 8:26)
Pon a sus nobles como a Oreb y Zeeb, Y a todos sus príncipes como a Zeba y Zalmuna, (Psalm 83:11)
Entonces él llamó apresuradamente al muchacho que era su escudero, y le dijo: "Saca tu espada y mátame, no sea que se diga de mí: 'Una mujer lo mató.'" Y el muchacho lo traspasó, y murió. (Judges 9:54)
Al ver su escudero que Saúl había muerto, él también se echó sobre su espada y murió con él. (1 Samuel 31:5)
En aquellos días los hombres buscarán la muerte y no la hallarán; y ansiarán morir, y la muerte huirá de ellos. (Revelation 9:6)
La batalla se intensificó contra Saúl, y los arqueros lo alcanzaron y fue gravemente herido por ellos. (1 Samuel 31:3)
Cántico. Salmo de Asaf. Oh Dios, no permanezcas en silencio; No calles, oh Dios, ni Te quedes quieto. (Psalm 83:1)