Nueva Biblia Latinoamericana
Por esta causa, algunos Judíos me prendieron en el templo y trataron de matarme. (Acts 26:21)
Así que habiendo recibido ayuda de Dios, continúo hasta este día testificando tanto a pequeños como a grandes, no declarando más que lo que los profetas y Moisés dijeron que sucedería: (Acts 26:22)
que el Cristo (el Mesías) había de padecer, y que por motivo de Su resurrección de entre los muertos, El debía ser el primero en proclamar luz tanto al pueblo Judío como a los Gentiles." (Acts 26:23)
Mientras Pablo decía esto en su defensa, Festo dijo a gran voz: "¡Pablo, estás loco! ¡Tu mucho saber te está haciendo perder la cabeza!"
Pero Pablo le respondió: "No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y de cordura. (Acts 26:25)
Porque el rey entiende estas cosas, y también le hablo con confianza, porque estoy persuadido de que él no ignora nada de esto; pues esto no se ha hecho en secreto. (Acts 26:26)
Rey Agripa, ¿cree usted en los profetas? Yo sé que cree." (Acts 26:27)

Other publications related to "Acts 26:24":

Dr. Roberto Miranda
Paul's evangelistic strategy
In this article, Dr. Roberto Miranda discusses Pauls evangelistic strategy and his preaching in the synagogue. The article highlights the importance of knowing Gods word, having a repentant heart, and choosing Christ. It also talks about the goal of building an evangelistic congregation to bless the community.


Dr. Roberto Miranda
Romans 9-11
Chapters 9-11 of Romans discuss God's plans for the Hebrew people and their relationship with salvation through Jesus Christ, emphasizing the importance of confessing Jesus, sharing the Gospel, and praying for a Jewish revival. The passage also discusses Jewish rebellion and the simplicity of obtaining salvation through faith.


Acts 26:24 - Cross Reference

Cuando Sus parientes oyeron esto, fueron para hacerse cargo de El, porque decían: "Está fuera de sí." (Mark 3:21)
Y muchos de ellos decían: "Tiene un demonio y está loco. ¿Por qué Le hacen caso?" (John 10:20)
sino que simplemente tenían contra él ciertas cuestiones sobre su propia religión, y sobre cierto Jesús, ya muerto, de quien Pablo afirmaba que estaba vivo. (Acts 25:19)
Cuando oyeron de la resurrección de los muertos, algunos se burlaban, pero otros dijeron: "Le escucharemos otra vez acerca de esto." (Acts 17:32)
Nosotros somos necios por amor de Cristo, pero ustedes, prudentes en Cristo. Nosotros somos débiles, pero ustedes, fuertes. Ustedes son distinguidos, pero nosotros, sin honra. (1 Corinthians 4:10)
El SEÑOR te ha puesto por sacerdote en lugar del sacerdote Joiada, para estar encargado en la casa del SEÑOR de todo loco que profetice, a fin de que lo pongas en el cepo y la argolla. (Jeremiah 29:26)
Entonces los Judíos se maravillaban, diciendo: "¿Cómo puede Este saber de letras sin haber estudiado?" (John 7:15)
Al disertar Pablo sobre la justicia, el dominio propio y el juicio venidero, Félix, atemorizado dijo: "Vete por ahora, pero cuando tenga tiempo te mandaré llamar." (Acts 24:25)
de lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las enseñadas por el Espíritu, combinando pensamientos espirituales con palabras espirituales. (1 Corinthians 2:13)
pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, piedra de tropiezo para los Judíos, y necedad para los Gentiles. (1 Corinthians 1:23)
Los Judíos Le dijeron: "Ahora sí sabemos que tienes un demonio. Abraham murió, y también los profetas, y Tú dices: 'Si alguien guarda Mi palabra no probará jamás la muerte.' (John 8:52)
Entonces Jehú salió a los siervos de su señor, y uno le dijo: "¿Va todo bien? ¿Por qué vino a ti este loco?" Y él les dijo: "Ustedes conocen bien al hombre y sus palabras." (2 Kings 9:11)
Porque si estamos locos, es para Dios; y si estamos cuerdos, es para ustedes. (2 Corinthians 5:13)
Han llegado los días del castigo, Han llegado los días de la retribución; ¡Que lo sepa Israel! Un insensato es el profeta, Un loco el hombre inspirado, A causa de la magnitud de tu culpa, Y por tu mucha hostilidad. (Hosea 9:7)
Castigándolos con frecuencia en todas las sinagogas, procuraba obligarlos a blasfemar, y enfurecido contra ellos, seguía persiguiéndolos aun hasta en las ciudades extranjeras. (Acts 26:11)
Hermanos y padres, escuchen mi defensa que ahora presento ante ustedes," decía Pablo. (Acts 22:1)
Los Judíos Le contestaron: "¿No decimos con razón que Tú eres Samaritano y que tienes un demonio?" (John 8:48)