Nueva Biblia Latinoamericana
Se acuerda él de sus nobles Que tropiezan en su marcha, Se apresuran a su muralla, Y es preparada la defensa. (Nahum 2:5)
Las compuertas de los ríos se abren, Y el palacio se llena de terror. (Nahum 2:6)
Está decretado: La reina es despojada y deportada, Y sus sirvientas gimen como palomas, Golpeándose el pecho. (Nahum 2:7)
Aunque Nínive era como estanque de aguas desde la antigüedad; Ahora ellos huyen. "¡Deténganse! ¡Deténganse!" Pero nadie se vuelve.
¡Saqueen la plata! ¡Saqueen el oro! No hay límite a los tesoros, A las riquezas de toda clase de objetos codiciables. (Nahum 2:9)
¡Vacía está! Sí, desolada y desierta. Los corazones se derriten y las rodillas tiemblan; Hay también angustia en todo el cuerpo, Y los rostros de todos han palidecido. (Nahum 2:10)
¿Dónde está la guarida de los leones Y el lugar donde comen los leoncillos, Donde andaban el león, la leona y su cachorro, Sin que nada los asustara? (Nahum 2:11)

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Nahum 2:8 - Cross Reference

¿Pero qué es lo que veo? Están aterrados, Retroceden, Y sus valientes están derrotados. En la huida buscan refugio Sin mirar atrás. Hay terror por todas partes" Declara el SEÑOR. (Jeremiah 46:5)
De aquella tierra salió hacia Asiria y edificó Nínive, Rehobot Ir, Cala, (Genesis 10:11)
Estás fatigada por los muchos consejos. Que se levanten ahora los que contemplan los cielos (los astrólogos), Los que profetizan por medio de las estrellas, Los que pronostican cada luna nueva, Y te salven de lo que vendrá sobre ti. (Isaiah 47:13)
Han dejado de luchar los valientes de Babilonia, Permanecen en las fortalezas; Se han agotado sus fuerzas, Se han vuelto como mujeres; Han sido incendiadas sus moradas, Rotos están sus cerrojos. (Jeremiah 51:30)
Exterminen de Babilonia al sembrador Y al que maneja la hoz en tiempo de la siega; Ante la espada opresora, Cada uno volverá a su pueblo, Cada uno huirá a su tierra. (Jeremiah 50:16)
Oh, tú, que moras junto a muchas aguas, Rica en tesoros, Ha llegado tu fin, El término de tu codicia. (Jeremiah 51:13)
También el ángel me dijo: "Las aguas que viste donde se sienta la ramera, son pueblos, multitudes, naciones y lenguas. (Revelation 17:15)
Tus oficiales son como la langosta, Tus jefes como nubes de langostas Posados sobre las tapias En un día de frío; Sale el sol, y se van, Y no se sabe donde están. (Nahum 3:17)
Uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, vino y habló conmigo: "Ven; te mostraré el juicio de la gran ramera que está sentada sobre muchas aguas. (Revelation 17:1)
Salgan de Babilonia, huyan de los Caldeos; Con voz de júbilo anuncien, proclamen esto, Publíquenlo hasta los confines de la tierra; Digan: "El SEÑOR ha redimido a Su siervo Jacob." (Isaiah 48:20)
Y sucederá, que como gacela perseguida O como ovejas que nadie reúne, Cada uno volverá a su propio pueblo, Y cada uno huirá a su propia tierra. (Isaiah 13:14)