Nueva Biblia Latinoamericana
Lo han oído los pueblos y tiemblan; El pavor se ha apoderado de los habitantes de Filistea. (Exodus 15:14)
Entonces se turbaron los príncipes de Edom; Los valientes (los jefes) de Moab se sobrecogieron de temblor; Se acobardaron todos los habitantes de Canaán. (Exodus 15:15)
Terror y espanto cae sobre ellos; Por la grandeza de Tu brazo quedan inmóviles, como piedra, Hasta que Tu pueblo pasa, oh SEÑOR, Hasta que pasa el pueblo que Tú has comprado. (Exodus 15:16)
Tú los traerás y los plantarás en el monte de Tu heredad, El lugar que has hecho para Tu morada, oh SEÑOR, El santuario, oh Señor, que Tus manos han establecido.
El SEÑOR reinará para siempre." (Exodus 15:18)
Porque los caballos de Faraón con sus carros y sus jinetes entraron en el mar, y el SEÑOR hizo volver sobre ellos las aguas del mar. Pero los Israelitas anduvieron por en medio del mar sobre tierra seca. (Exodus 15:19)
Miriam la profetisa, hermana de Aarón, tomó en su mano el pandero, y todas las mujeres salieron tras ella con panderos y danzas. (Exodus 15:20)

Other publications related to "Exodus 15:17":

Samuel Acevedo
Do not fear, nor dismay
A discussion on the role of fear and discouragement in the Book of Deuteronomy and how to overcome them through a living relationship with God.


Samuel Acevedo
Be still, and know that I am God
In Psalm 46, the key text of Palm Sunday, the prophetic Word of Zechariah 9:9 is echoed. The author shares his personal lesson of learning to be still before the Lord and trusting in Gods timing.


Exodus 15:17 - Cross Reference

Cantaré ahora a mi amado, El canto de mi amado acerca de Su viña. Mi bien amado tenía una viña en una fértil colina. (Isaiah 5:1)
Porque el SEÑOR ha escogido a Sion; La quiso para Su habitación. (Psalm 132:13)
Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: "Otra vez hablarán esta palabra en la tierra de Judá y en sus ciudades, cuando Yo restaure su bienestar (haga volver a sus cautivos): 'El SEÑOR te bendiga, morada de justicia, Monte santo.' (Jeremiah 31:23)
Me regocijaré en ellos haciéndoles bien, y ciertamente los plantaré en esta tierra, con todo Mi corazón y con toda Mi alma. (Jeremiah 32:41)
Sino que escogió a la tribu de Judá, Al Monte Sion que El amaba. (Psalm 78:68)
Tú removiste una vid de Egipto; Expulsaste las naciones y plantaste la vid. (Psalm 80:8)
Tú con Tu mano echaste fuera las naciones, Pero a ellos los plantaste. Afligiste a los pueblos, Pero a ellos los hiciste crecer. (Psalm 44:2)
Los trajo, pues, a Su tierra santa, A esta tierra montañosa que Su diestra había adquirido. (Psalm 78:54)
Pero Yo te planté como vid escogida, Toda ella de semilla genuina. ¿Cómo, pues, te has convertido delante de Mí En un sarmiento degenerado de una vid extraña? (Jeremiah 2:21)