Nueva Biblia Latinoamericana
Cuando Israel vio a los hijos de José, dijo: "¿Quiénes son éstos?" (Genesis 48:8)
Y José respondió a su padre: "Son mis hijos, los que Dios me ha dado aquí." "Acércalos a mí, te ruego, para que yo los bendiga," le dijo. (Genesis 48:9)
Los ojos de Israel estaban tan débiles por la vejez que no podía ver. Entonces José se los acercó, y él los besó y los abrazó. (Genesis 48:10)
Israel dijo a José: "Nunca esperaba ver tu rostro, y mira, Dios me ha permitido ver también a tus hijos."
Entonces José los tomó de las rodillas de Jacob, y se inclinó con su rostro en tierra. (Genesis 48:12)
José tomó a los dos, a Efraín con la derecha, hacia la izquierda de Israel, y a Manasés con la izquierda, hacia la derecha de Israel, y se los acercó. (Genesis 48:13)
Pero Israel extendió su derecha y la puso sobre la cabeza de Efraín, que era el menor, y su izquierda sobre la cabeza de Manasés, cruzando a propósito sus manos, aunque Manasés era el primogénito. (Genesis 48:14)

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Genesis 48:11 - Cross Reference

Todos sus hijos y todas sus hijas vinieron para consolarlo, pero él rehusó ser consolado, y dijo: "Ciertamente enlutado bajaré al Seol (región de los muertos) por causa de mi hijo." Y su padre lloró por él. (Genesis 37:35)
Y su padre Jacob les dijo: "Ustedes me han privado de mis hijos; José ya no existe, y Simeón ya no existe, y ahora se quieren llevar a Benjamín. Todas estas cosas son contra mí." (Genesis 42:36)
Y a Aquél que es poderoso para hacer todo mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que obra en nosotros, (Ephesians 3:20)
El la examinó, y dijo: "Es la túnica de mi hijo. Una fiera lo ha devorado. Sin duda José ha sido despedazado." (Genesis 37:33)
Y le informaron: "José vive todavía y es gobernante en toda la tierra de Egipto." Pero él se quedó atónito, porque no les podía creer. (Genesis 45:26)