Clamaron, pero no hubo quién los salvara; Aun al SEÑOR clamaron, pero no les respondió.
(Psalm 18:41)
Entonces los desmenucé como polvo delante del viento; Los arrojé como lodo de las calles.
(Psalm 18:42)
Tú me has librado de las contiendas del pueblo; Me has puesto por cabeza de las naciones; Pueblo que yo no conocía me sirve.
(Psalm 18:43)
Al oírme, me obedecen; Los extranjeros me fingen obediencia.
Los extranjeros desfallecen, Y salen temblando de sus fortalezas.
(Psalm 18:45)
El SEÑOR vive, bendita sea mi roca, Y ensalzado sea el Dios de mi salvación,
(Psalm 18:46)
El Dios que por mí ejecuta venganza, Y subyuga pueblos debajo de mí;
(Psalm 18:47)
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Psalm 18:44 - Cross Reference
David le preguntó al joven que se lo había contado: "¿De dónde eres?" "Soy hijo de un extranjero, un Amalecita," le respondió.
(2 Samuel 1:13)
El SEÑOR ha jurado por Su diestra y por Su fuerte brazo: "Nunca más daré tu grano por alimento a tus enemigos, Ni hijos de extranjeros beberán tu vino nuevo por el que trabajaste."
(Isaiah 62:8)
cuando introdujeron extranjeros, incircuncisos de corazón e incircuncisos de carne, para que estuvieran en Mi santuario y profanaran Mi casa; cuando les ofrecieron Mi alimento, la grasa y la sangre; invalidaron, pues, Mi pacto; esto además de todas sus abominaciones.
(Ezekiel 44:7)
Tú me has librado también de las contiendas de mi pueblo; Me has guardado para ser cabeza de naciones; Pueblo que yo no conocía me sirve.
(2 Samuel 22:44)
Dichoso tú, Israel. ¿Quién como tú, pueblo salvado por el SEÑOR? El es escudo de tu ayuda, Y espada de tu gloria. Tus enemigos simularán someterse ante ti, Y tú pisotearás sus lugares altos."
(Deuteronomy 33:29)
Digan a Dios: "¡Cuán portentosas son Tus obras! Por la grandeza de Tu poder, Tus enemigos fingirán que Te obedecen.
(Psalm 66:3)
Sin embargo, no todos hicieron caso al evangelio, porque Isaías dice: "SEÑOR, ¿QUIEN HA CREIDO A NUESTRO ANUNCIO?"
(Romans 10:16)
Los que aborrecen al SEÑOR Le fingirían obediencia, Y el tiempo de su castigo sería para siempre.
(Psalm 81:15)
Reprende las fieras de las cañas, La manada de toros con los becerros de los pueblos, Pisoteando las piezas de plata; El ha dispersado a los pueblos que se deleitan en la guerra.
(Psalm 68:30)