Job 40:4 - Cross Reference

Por eso me retracto, Y me arrepiento en polvo y ceniza." (Job 42:6)

Al ver esto, Simón Pedro cayó a los pies de Jesús, diciendo: "¡Apártate de mí, Señor, pues soy hombre pecador!" (Luke 5:8)

Mudo me he quedado, no abro la boca, Porque Tú eres el que ha obrado. (Psalm 39:9)

¡Ah, si un hombre pudiera discutir con Dios Como un hombre con su vecino! (Job 16:21)

Verán las naciones y se avergonzarán De todo su poderío; Se pondrán la mano sobre la boca, Sus oídos se ensordecerán. (Micah 7:16)

Si has sido necio en ensalzarte, O si has tramado el mal, pon la mano sobre tu boca; (Proverbs 30:32)

Entonces dije: "¡Ay de mí! Porque perdido estoy, Pues soy hombre de labios inmundos Y en medio de un pueblo de labios inmundos habito, Porque mis ojos han visto al Rey, el SEÑOR de los ejércitos." (Isaiah 6:5)

Pero el recaudador de impuestos, de pie y a cierta distancia, no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: 'Dios, ten piedad de mí, pecador.' (Luke 18:13)

Guarde silencio toda carne delante del SEÑOR, porque El se ha levantado de Su santa morada." (Zechariah 2:13)

Pero el SEÑOR está en Su santo templo: Calle delante de El toda la tierra." (Habakkuk 2:20)

Expondría ante El mi causa, Llenaría mi boca de argumentos. (Job 23:4)

Del número de mis pasos yo Le daría cuenta, Como a un príncipe me acercaría a El. (Job 31:37)

Ellos le respondieron: "Calla, pon la mano sobre tu boca y ven con nosotros, y sé padre y sacerdote para nosotros. ¿Te es mejor ser sacerdote para la casa de un hombre, o ser sacerdote para una tribu y una familia de Israel?" (Judges 18:19)

Los príncipes dejaban de hablar Y ponían la mano sobre su boca; (Job 29:9)

Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: "Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; (Luke 15:18)

Y Abraham respondió: "Ahora que me he atrevido a hablar al Señor, yo que soy polvo y ceniza. (Genesis 18:27)

Después que David contó el pueblo le pesó en su corazón. Y David dijo al SEÑOR: "He pecado en gran manera por lo que he hecho. Pero ahora, oh SEÑOR, Te ruego que quites la iniquidad de Tu siervo, porque he obrado muy neciamente." (2 Samuel 24:10)

hemos pecado, hemos cometido iniquidad, hemos hecho lo malo, nos hemos rebelado y nos hemos apartado de Tus mandamientos y de Tus ordenanzas. (Daniel 9:5)

y anduvo por el desierto un día de camino, y vino y se sentó bajo un arbusto (enebro); pidió morirse y dijo: "Basta ya, SEÑOR, toma mi vida porque yo no soy mejor que mis padres." (1 Kings 19:4)

Aun así me hundirías en la fosa, Y mis propios vestidos me aborrecerían. (Job 9:31)

Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, Nos apartamos cada cual por su camino; Pero el SEÑOR hizo que cayera sobre El La iniquidad de todos nosotros. (Isaiah 53:6)

Tuya es la justicia, oh Señor, y nuestra la vergüenza en el rostro, como sucede hoy a los hombres de Judá, a los habitantes de Jerusalén y a todo Israel, a los que están cerca y a los que están lejos en todos los países adonde los has echado, a causa de las infidelidades que cometieron contra Ti. (Daniel 9:7)

Mírenme, y quédense atónitos, Y pongan la mano sobre su boca. (Job 21:5)

Oh SEÑOR, Dios de Israel, Tú eres justo, porque hemos quedado un remanente que ha escapado, como en este día. Ahora, estamos delante de Ti con nuestra culpa, porque nadie puede estar delante de Ti a causa de esto." (Ezra 9:15)

Contra Ti, contra Ti sólo he pecado, Y he hecho lo malo delante de Tus ojos, De manera que eres justo cuando hablas, Y sin reproche cuando juzgas. (Psalm 51:4)

Todos nosotros somos como el inmundo, Y como trapo de inmundicia todas nuestras obras justas. Todos nos marchitamos como una hoja, Y nuestras iniquidades, como el viento, nos arrastran. (Isaiah 64:6)

Indigno soy de toda misericordia y de toda la fidelidad que has mostrado a Tu siervo. Porque con sólo mi cayado crucé este Jordán, y ahora he llegado a tener dos campamentos. (Genesis 32:10)

Pero Tú eres justo en todo lo que ha venido sobre nosotros, Porque Tú has obrado fielmente, Pero nosotros, perversamente. (Nehemiah 9:33)

Palabra fiel y digna de ser aceptada por todos: Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, entre los cuales yo soy el primero. (1 Timothy 1:15)

y dije: "Dios mío, estoy avergonzado y confuso para poder levantar mi rostro a Ti, mi Dios, porque nuestras iniquidades se han multiplicado por encima de nuestras cabezas, y nuestra culpa ha crecido hasta los cielos. (Ezra 9:6)