Nueva Biblia Latinoamericana
Esto me desagradó mucho, por lo cual arrojé todos los muebles de la casa de Tobías fuera del aposento. (Nehemiah 13:8)
Entonces ordené que limpiaran los aposentos; y puse de nuevo allí los utensilios de la casa de Dios con las ofrendas de cereal y el incienso. (Nehemiah 13:9)
También descubrí que las porciones de los Levitas no se les habían dado, por lo que los Levitas y los cantores que hacían el servicio se habían ido, cada uno a su campo. (Nehemiah 13:10)
Por tanto, reprendí a los oficiales, y les dije: "¿Por qué está la casa de Dios abandonada?" Entonces reuní a los Levitas y los restablecí en sus puestos.
Entonces todo Judá trajo el diezmo del cereal, del vino nuevo y del aceite a los almacenes. (Nehemiah 13:12)
Y puse al frente de los almacenes al sacerdote Selemías, al escriba Sadoc, y a Pedaías, uno de los Levitas; además de éstos estaba Hanán, hijo de Zacur, hijo de Matanías; porque se les consideraba dignos de confianza, y su responsabilidad era repartir las raciones a sus parientes. (Nehemiah 13:13)
Acuérdate de mí por esto, Dios mío, y no borres las obras de misericordia que he hecho por la casa de mi Dios y por sus servicios. (Nehemiah 13:14)

Other publications related to "Nehemiah 13:11":

Dr. Roberto Miranda
Generosity and gratitude
The author emphasizes the importance of generosity and gratitude in the fulfilling of the great commission and the growth of the church, reflecting on the blessings that the Lord has bestowed upon their congregation and the importance of giving thanks to the Lord for these blessings. The article discusses the tradition of offering sacrifices and offerings to the Lord, as well as the need for forgiveness and commitment to a life of holiness and obedience to God.


Dr. Roberto Miranda
Take heart people all of the earth - And work
In this article, Dr. Roberto Miranda encourages sacrificial giving and hard work to build the Kingdom of God, and emphasizes the importance of focusing on Gods glory.


Nehemiah 13:11 - Cross Reference

Entonces me enojé en gran manera cuando oí su clamor y estas palabras. (Nehemiah 5:6)
Porque temí a la gran multitud, O el desprecio de las familias me aterró, Y guardé silencio y no salí de mi puerta? (Job 31:34)
¿Robará el hombre a Dios? Pues ustedes Me están robando. Pero dicen: '¿En qué Te hemos robado?' En los diezmos y en las ofrendas. (Malachi 3:8)
Los que abandonan la ley alaban a los impíos, Pero los que guardan la ley luchan contra ellos. (Proverbs 28:4)
El pecado de los jóvenes era muy grande delante del SEÑOR, porque despreciaban la ofrenda del SEÑOR. (1 Samuel 2:17)
Así que los reprendí y los maldije, herí a algunos de ellos y les arranqué el cabello, y les hice jurar por Dios, diciéndoles: "No darán sus hijas a sus hijos; tampoco tomarán de sus hijas para sus hijos ni para ustedes mismos. (Nehemiah 13:25)
Entonces reprendí a los nobles de Judá, y les dije: "¿Qué acción tan mala es ésta que cometen profanando el día de reposo? (Nehemiah 13:17)
Porque los Israelitas y los hijos de Leví llevan la contribución del cereal, del vino nuevo y del aceite a las cámaras; allí están los utensilios del santuario, los sacerdotes que ministran, los porteros y los cantores. Así no descuidaremos la casa de nuestro Dios. (Nehemiah 10:39)