Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Ezequías se regocijó con todo el pueblo por lo que Dios había preparado para el pueblo, pues todo sucedió rápidamente. (2 Chronicles 29:36)
Entonces Ezequías envió aviso por todo Israel y Judá, y también escribió cartas a Efraín y a Manasés, para que vinieran a la casa del SEÑOR en Jerusalén a fin de celebrar la Pascua al SEÑOR, Dios de Israel. (2 Chronicles 30:1)
Pues el rey y sus príncipes y toda la asamblea en Jerusalén habían decidido celebrar la Pascua en el mes segundo, (2 Chronicles 30:2)
porque no la habían podido celebrar a su debido tiempo, pues los sacerdotes no se habían santificado en número suficiente, ni el pueblo se había reunido en Jerusalén.
Y esto pareció bien a los ojos del rey y de toda la asamblea. (2 Chronicles 30:4)
Así que proclamaron un decreto para hacer correr la voz por todo Israel, desde Beerseba hasta Dan, para que vinieran a celebrar la Pascua al SEÑOR, Dios de Israel, en Jerusalén. Porque muchos no la habían celebrado como estaba escrito. (2 Chronicles 30:5)
Los mensajeros fueron por todo Israel y Judá con cartas de parte del rey y de sus príncipes, conforme al mandamiento del rey, diciendo: "Israelitas, vuélvanse al SEÑOR, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, para que El se vuelva a aquellos de ustedes que escaparon y que han quedado de la mano de los reyes de Asiria. (2 Chronicles 30:6)

Other publications related to "2 Chronicles 30:3":

Dr. Roberto Miranda
II Chronicles 29
The author discusses the importance of loving God passionately and prioritizing spiritual renewal for prosperity, using the example of King Hezekiah in II Chronicles 29.


Dr. Roberto Miranda
Revival
The story of King Hezekiah in Second Chronicles chapter 29 is a story of revival and the importance of holiness, prayer, and consecration for it. The writer urges congregations and individuals to prioritize their relationship with God and be sources of revival for their cities and regions.


2 Chronicles 30:3 - Cross Reference

En el mes primero comerán los panes sin levadura, desde el día catorce del mes por la tarde, hasta el día veintiuno del mes por la tarde. (Exodus 12:18)
Comenzaron la santificación el primer día del mes primero, y el octavo día del mes entraron hasta el pórtico del SEÑOR; entonces santificaron la casa del SEÑOR en ocho días, y terminaron el día dieciséis del mes primero. (2 Chronicles 29:17)
Y lo guardarán hasta el día catorce del mismo mes. Entonces toda la asamblea de la congregación de Israel lo matará al anochecer. (Exodus 12:6)
Pero los sacerdotes eran pocos, y no pudieron desollar todos los holocaustos; por eso sus hermanos los Levitas los ayudaron hasta que se acabó la obra y hasta que los otros sacerdotes se hubieron santificado. Porque los Levitas fueron más cuidadosos para santificarse que los sacerdotes. (2 Chronicles 29:34)