Negociar con el talento que Dios te ha dado
Dr. Roberto Miranda
(Audio: Español)
RESUMEN: En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de ser generosos con Dios y usar nuestros dones y talentos para su Reino. Él menciona la parábola de los siervos y cómo cada uno de ellos recibió una mina del dueño antes de irse a un país lejano. El dueño les dijo que negociaran con la mina hasta que él regresara. El pastor utiliza esta historia para ilustrar que cada uno de nosotros ha recibido algo de Dios y se espera que lo usemos para su gloria. Él enfatiza que la vida cristiana no es fácil, pero que Dios nos promete victoria en todas las situaciones si somos fieles y trabajamos duro. El pastor anima a su congregación a invertir sus energías, talentos y recursos en el Reino de Dios hasta que Jesús regrese.
El hombre noble de la parábola en Lucas 19:11-27 dio a sus siervos una mina cada uno y les dijo que negociaran con ella hasta su regreso. Esto simboliza los dones del Espíritu Santo que Dios ha puesto en cada uno de nosotros. Es importante entender que Dios ha puesto algo en nosotros y espera que hagamos algo con eso. Debemos preguntarnos qué estamos haciendo para rendir la medida de gracia y de vida que Dios puso en nosotros. Dios quiere que seamos liberales y generosos con nuestros recursos. Necesitamos ser una iglesia aguerrida, agresiva, militante, emprendedora, e invertir en el Reino de Dios. La oportunidad de construir un santuario más amplio es importante para la iglesia para poder continuar creciendo y hacer más cosas para el nombre del Señor.
El sermón habla de la importancia de invertir en el Reino de Dios y darle rendimiento a Dios. El predicador anima a los fieles a no dejarse vencer por el miedo o la timidez, sino a moverse en el poder del Espíritu Santo y confiar en Dios. También destaca que lo que hacemos aquí en la tierra puede tener un impacto en la eternidad y que Dios espera rendimiento de nosotros. El predicador llama a levantar una iglesia guerrera y comprometida con el Reino de Dios.
Se pide al Señor que active su llamado en nuestros corazones y levante hombres y mujeres que perseveren en su camino. Se agradece y adora al Señor por su enseñanza y se pide que la selle en el corazón de su pueblo.
El hombre noble de la parábola en Lucas 19:11-27 dio a sus siervos una mina cada uno y les dijo que negociaran con ella hasta su regreso. Esto simboliza los dones del Espíritu Santo que Dios ha puesto en cada uno de nosotros. Es importante entender que Dios ha puesto algo en nosotros y espera que hagamos algo con eso. Debemos preguntarnos qué estamos haciendo para rendir la medida de gracia y de vida que Dios puso en nosotros. Dios quiere que seamos liberales y generosos con nuestros recursos. Necesitamos ser una iglesia aguerrida, agresiva, militante, emprendedora, e invertir en el Reino de Dios. La oportunidad de construir un santuario más amplio es importante para la iglesia para poder continuar creciendo y hacer más cosas para el nombre del Señor.
El sermón habla de la importancia de invertir en el Reino de Dios y darle rendimiento a Dios. El predicador anima a los fieles a no dejarse vencer por el miedo o la timidez, sino a moverse en el poder del Espíritu Santo y confiar en Dios. También destaca que lo que hacemos aquí en la tierra puede tener un impacto en la eternidad y que Dios espera rendimiento de nosotros. El predicador llama a levantar una iglesia guerrera y comprometida con el Reino de Dios.
Se pide al Señor que active su llamado en nuestros corazones y levante hombres y mujeres que perseveren en su camino. Se agradece y adora al Señor por su enseñanza y se pide que la selle en el corazón de su pueblo.
Lucas 19, lo que estamos diciendo es que yo he estado siguiendo en todo lo posible una serie de sermones que enfocamos mucho tiempo una de las grandes doctrinas de la iglesia que es el Espíritu Santo y su ministerio y el bautismo del Espíritu Santo, los dones, etc. y lo que estoy haciendo es trayendo estas enseñanzas sobre grandes verdades, grandes principios de la doctrina cristiana. El domingo antepasado yo tuve la oportunidad de enfocar una de las grandes doctrinas de la iglesia cristiana ortodoxa histórica, que es la divinidad de Jesús. ¿Recuerdan ese sermón? La divinidad de Jesús. Cristo como consustancial con el Padre. Y vimos como la palabra del Señor soporta y hace casi inevitable esa conclusión.
Y yo quiero desarrollar un poco más esa enseñanza tan profunda y tan esencial para la vida del pueblo de Dios, pero hoy me hubiera gustado hacer eso, pero quiero aprovechar para sembrar una semilla de fe en su corazón y de visión acerca de el darle al Señor generosamente, de ser diligentes en aportar al Reino de Dios, no solamente voy a hablar de dinero sino voy a hablar simplemente de nuestras vidas, nuestros talentos, nuestros dones, darle al Señor. Capítulo 19, 11 al 27. Yo retomaré el tema de Cristo y su deidad en algún momento pronto. Pero en esta mañana quiero aprovechar todo esto que hemos hecho aquí para educarles a ustedes, hermanos.
Y yo quiero desarrollar un poco más esa enseñanza tan profunda y tan esencial para la vida del pueblo de Dios, pero hoy me hubiera gustado hacer eso, pero quiero aprovechar para sembrar una semilla de fe en su corazón y de visión acerca de el darle al Señor generosamente, de ser diligentes en aportar al Reino de Dios, no solamente voy a hablar de dinero sino voy a hablar simplemente de nuestras vidas, nuestros talentos, nuestros dones, darle al Señor. Capítulo 19, 11 al 27. Yo retomaré el tema de Cristo y su deidad en algún momento pronto. Pero en esta mañana quiero aprovechar todo esto que hemos hecho aquí para educarles a ustedes, hermanos.
