Dónde está tu tesoro? Dónde está tu corazón?
Dr. Roberto Miranda
(Audio: Español)
RESUMEN: En este sermón, el pastor habla sobre la necesidad de confiar en Dios en tiempos de dificultades financieras. Se basa en Lucas 12:22-31, donde Jesús dice que no debemos preocuparnos por nuestras necesidades básicas, ya que Dios las proveerá. El pastor enfatiza que como cristianos, debemos buscar primero el Reino de Dios y confiar en que Él nos proveerá. También se enfoca en el versículo 33, donde Jesús nos anima a almacenar tesoros en el cielo, donde no hay ladrones ni polillas que puedan destruirlos. En resumen, el pastor nos llama a depositar nuestra confianza en Dios y buscar las cosas eternas en lugar de las temporales.
El marco de referencia de los hijos de Dios es diferente al de los hijos del mundo, ya que su confianza está puesta en el Señor y sus afectos están en lo eterno. La crisis financiera actual ha llevado a muchas personas a la desesperación y al suicidio, ya que su identidad y seguridad se basaban en lo material y su control sobre la vida. Sin embargo, los hijos de Dios saben que la vida no está bajo su control, sino en las manos de Dios, y que lo que sucede en su vida es para la gloria y bendición de Dios. Por lo tanto, pueden trabajar duro y esforzarse sin obsesionarse con el éxito y confiando en el Señor en todo momento. La parábola del rico necio en la Biblia muestra cómo el control y la obsesión por lo material pueden llevar a la destrucción.
En este sermón, el pastor habla acerca del control y la perspectiva divina en tiempos de crisis y dificultad. Se enfoca en la importancia de confiar en Dios y no en nosotros mismos, ya que la humanidad siempre ha tratado de reinventar la historia y controlar las cosas sin éxito. El pastor menciona varios relatos bíblicos para ilustrar su punto, incluyendo la parábola del rico necio, la historia de Sísifo y los relatos de Jesús en la barca durante una tormenta. También destaca la importancia de la oración en tiempos de prueba y dificultad para abrir la válvula de escape y recordarnos que somos seres eternos. El sermón termina con una cita del libro de Deuteronomio que habla acerca de cómo Dios nos prueba y nos castiga como un padre a su hijo para enseñarnos a confiar en él y seguir sus mandamientos. El pastor cree que Dios tiene buenas cosas para nosotros en el futuro, pero primero debemos aprender de esta lección espiritual y recordar que no vivimos solo de cosas materiales.
El orador cree que Dios tiene buenas cosas para nosotros y quiere darnos una lección espiritual en este tiempo de crisis. Pide a Dios que renueve nuestras mentes y perspectivas y que nos ayude a confiar en Él, incluso si perdemos cosas materiales. También pide por la paz de aquellos que están sufriendo y por sabiduría para los líderes de la nación. En resumen, debemos confiar en Dios y poner nuestra esperanza en Él.
El marco de referencia de los hijos de Dios es diferente al de los hijos del mundo, ya que su confianza está puesta en el Señor y sus afectos están en lo eterno. La crisis financiera actual ha llevado a muchas personas a la desesperación y al suicidio, ya que su identidad y seguridad se basaban en lo material y su control sobre la vida. Sin embargo, los hijos de Dios saben que la vida no está bajo su control, sino en las manos de Dios, y que lo que sucede en su vida es para la gloria y bendición de Dios. Por lo tanto, pueden trabajar duro y esforzarse sin obsesionarse con el éxito y confiando en el Señor en todo momento. La parábola del rico necio en la Biblia muestra cómo el control y la obsesión por lo material pueden llevar a la destrucción.
En este sermón, el pastor habla acerca del control y la perspectiva divina en tiempos de crisis y dificultad. Se enfoca en la importancia de confiar en Dios y no en nosotros mismos, ya que la humanidad siempre ha tratado de reinventar la historia y controlar las cosas sin éxito. El pastor menciona varios relatos bíblicos para ilustrar su punto, incluyendo la parábola del rico necio, la historia de Sísifo y los relatos de Jesús en la barca durante una tormenta. También destaca la importancia de la oración en tiempos de prueba y dificultad para abrir la válvula de escape y recordarnos que somos seres eternos. El sermón termina con una cita del libro de Deuteronomio que habla acerca de cómo Dios nos prueba y nos castiga como un padre a su hijo para enseñarnos a confiar en él y seguir sus mandamientos. El pastor cree que Dios tiene buenas cosas para nosotros en el futuro, pero primero debemos aprender de esta lección espiritual y recordar que no vivimos solo de cosas materiales.
El orador cree que Dios tiene buenas cosas para nosotros y quiere darnos una lección espiritual en este tiempo de crisis. Pide a Dios que renueve nuestras mentes y perspectivas y que nos ayude a confiar en Él, incluso si perdemos cosas materiales. También pide por la paz de aquellos que están sufriendo y por sabiduría para los líderes de la nación. En resumen, debemos confiar en Dios y poner nuestra esperanza en Él.
Vamos a la palabra del Señor. Quiero compartir con ustedes en esta mañana precisamente, yo creo que Dios ha dirigido soberanamente, sin ningún tipo de esfuerzos previos nuestra adoración hacia un enfoque de esperanza, de gratitud al Señor, en medio de situaciones de pruebas y de dificultades como las que está viviendo esta nación.
Y yo quiero traer un mensaje en esta mañana que yo espero que su efecto sea un efecto de consuelo, un efecto de consejo y un efecto de confianza y de bendición para nuestros hermanos, en tiempos de pruebas y de dificultades financieras nosotros tenemos ayuda y socorro, y fundamento en la palabra del Señor.
Y yo quiero traer un mensaje en esta mañana que yo espero que su efecto sea un efecto de consuelo, un efecto de consejo y un efecto de confianza y de bendición para nuestros hermanos, en tiempos de pruebas y de dificultades financieras nosotros tenemos ayuda y socorro, y fundamento en la palabra del Señor.
