Nueva Biblia Latinoamericana
Cuando Jehú entraba por la puerta, ella dijo: "¿Le va bien a Zimri, asesino de tu señor?" (2 Reyes 9:31)
Entonces Jehú alzó su rostro hacia la ventana y dijo: "¿Quién está conmigo? ¿Quién?" Y dos o tres oficiales se asomaron desde arriba. (2 Reyes 9:32)
Y Jehú les dijo: "Echenla abajo." Y la echaron abajo y parte de su sangre salpicó la pared y los caballos, y él la pisoteó. (2 Reyes 9:33)
Cuando él entró, comió y bebió; entonces dijo: "Encárguense ahora de esta maldita y entiérrenla, pues es hija de rey."
Cuando fueron a enterrarla, no encontraron de ella más que el cráneo, los pies y las palmas de sus manos. (2 Reyes 9:35)
Entonces, volvieron y se lo hicieron saber. Entonces Jehú dijo: "Esta es la palabra que el SEÑOR habló por medio de Su siervo Elías el Tisbita: 'En la parcela de Jezreel los perros comerán la carne de Jezabel; (2 Reyes 9:36)
y el cadáver de Jezabel será como estiércol sobre la superficie del campo en la parcela de Jezreel, para que no puedan decir: "Esta es Jezabel."'" (2 Reyes 9:37)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Reyes 9:34":

Gregory Bishop
Profetas falsos
En el libro de Apocalipsis, Jesús habla a la iglesia de Tiatira sobre la profetiza falsa que enseña doctrinas falsas y promueve la inmoralidad sexual e idolatría. Jesús llama a la iglesia a resistir la enseñanza falsa y retener la verdad para brillar como estrella en medio de una generación perversa.


Susan Combs
Sal de la cueva
Lección sobre la importancia de reconocer nuestros errores y tener una relación íntima con Dios, basada en la historia de Elías en 1 Reyes 18-19.


2 Reyes 9:34 - Referencia Cruzada

Como si fuera poco el andar en los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, tomó por mujer a Jezabel, hija de Et Baal, rey de los Sidonios, y fue a servir a Baal y lo adoró. (1 Reyes 16:31)
La memoria del justo es bendita, Pero el nombre del impío se pudrirá. (Proverbios 10:7)
Los que se acuestan en camas de marfil, Se tienden sobre sus lechos, Comen corderos del rebaño Y terneros de en medio del establo; (Amós 6:4)
Salieron los correos apremiados por la orden del rey. El decreto fue promulgado (fue dado al pueblo) en la fortaleza de Susa, y mientras el rey y Amán se sentaron a beber, la ciudad de Susa estaba turbada. (Ester 3:15)
Entonces dirá también a los de Su izquierda: 'Apártense de Mí, malditos, al fuego eterno que ha sido preparado para el diablo y sus ángeles. (Mateo 25:41)
Y Elías dijo a Acab: "Sube, come y bebe; porque se oye el estruendo de mucha lluvia." (1 Reyes 18:41)
Ciertamente no hubo nadie como Acab que se vendiera para hacer lo malo ante los ojos del SEÑOR, porque Jezabel su mujer lo había convencido. (1 Reyes 21:25)
Y dejarán su nombre como maldición a Mis escogidos. El Señor DIOS te matará, Pero Mis siervos serán llamados por otro nombre. (Isaías 65:15)