Entonces Esaú dijo: "Pongámonos en marcha y vámonos; yo iré delante de ti." (Génesis 33:12)

Pero él le dijo: "Mi señor sabe que los niños son tiernos, y que debo cuidar de las ovejas y las vacas que están criando. Si los apuramos mucho, en un solo día todos los rebaños morirán. (Génesis 33:13)

Adelántese ahora mi señor a su siervo; y yo avanzaré sin prisa, al paso del ganado que va delante de mí, y al paso de los niños, hasta que llegue a mi señor en Seir." (Génesis 33:14)

Y Esaú dijo: "Permíteme dejarte parte de la gente que está conmigo." "¿Para qué? Halle yo gracia ante los ojos de mi señor," le respondió Jacob.

Aquel mismo día regresó Esaú por su camino a Seir. (Génesis 33:16)

Jacob siguió hasta Sucot. Allí se edificó una casa e hizo cobertizos para su ganado. Por eso al lugar se le puso el nombre de Sucot. (Génesis 33:17)

Jacob llegó sin novedad a la ciudad de Siquem, que está en la tierra de Canaán, cuando vino de Padán Aram, y acampó frente a la ciudad. (Génesis 33:18)

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Génesis 33:15 - Referencia Cruzada

Dijo también Siquem al padre y a los hermanos de ella: "Si hallo gracia ante sus ojos, les daré lo que me digan. (Génesis 34:11)

Y ellos dijeron: "Nos ha salvado la vida. Hallemos gracia ante los ojos de Faraón mi señor, y seremos siervos de Faraón." (Génesis 47:25)

Y el rey dijo a Siba: "Mira, todo lo que pertenece a Mefiboset es tuyo." Y Siba dijo: "Me inclino ante usted; que halle yo gracia ante sus ojos, oh rey, mi señor." (2 Samuel 16:4)

Entonces ella dijo: "Señor mío, he hallado gracia ante sus ojos, porque me ha consolado y en verdad ha hablado con bondad a su sierva, aunque yo no soy ni como una de sus criadas." (Rut 2:13)

Pregunta a tus criados, y ellos te lo dirán. Por tanto, permite que mis criados hallen gracia ante tus ojos, porque hemos llegado en un día de fiesta. Te ruego que de lo que tengas a mano, des a tus siervos y a tu hijo David.'" (1 Samuel 25:8)